/ viernes 3 de enero de 2020

COMUNIDAD Y FAMILIA

2020: Año de cambios significativos


Con toda seguridad mis queridos lectores, en los últimos días y gracias a las redes sociales todos hemos leído y escuchado toda clase de felicitaciones y buenos deseos de felicidad para este nuevo año 2020, del que, gracias a Dios, ya estamos disfrutando. Estas felicitaciones han sido tan variadas que van desde las más emotivas y elocuentes hasta las más chuscas y ocurrentes que logran arrancarnos unas carcajadas sin importar dónde nos encontremos.

También, en los días previos a la llegada del nuevo año los medios dedicaron muchas horas para dar o recibir consejos para que nos vaya bien en el amor, la salud, las finanzas, etc…, que si el calzón rojo, que si el amarillo, que si barrer o trapear, que si las velas, que si los decretos, que si las uvas, que si las monedas… y la lista sigue y sigue. Les confieso que al escuchar algunos de estos tips he reflexionado en la evidente necesidad que tiene el ser humano de asegurar un buen futuro, de ese deseo de vivir bien y tener esperanza. La verdad es que ese deseo es legítimo, está en nuestro ADN; todo nuestro ser clama por salud, por vida, por prosperidad, por amor y paz, por trascendencia, por un propósito para vivir. Pero la pregunta del millón es: ¿Qué tan dispuestos estamos para hacer algo diferente en nuestro día a día, que nos produzca resultados diferentes a los que obtuvimos en el 2019? Hay una frase muy famosa que se le atribuye al asombroso científico e inventor Albert Einstein que dice: “Locura es hacer la misma cosa una y otra vez, esperando resultados diferentes”, estas palabras nos retan para hacer cambios significativos en nuestra vida, si realmente queremos vivir mejor, porque podremos hacer todos los rituales de buena suerte que conozcamos, pero la clave de todo está en cómo vivimos diariamente y cómo sembramos en nuestra propia vida y en la de otros, porque de ellos recibiremos un resultado, un fruto bueno o malo. Queridos lectores, no pretendo saberlo todo, ni siquiera quiero ponerme como ejemplo delante de ustedes, simplemente deseo que todos sean realmente felices durante este año, que disfruten el regalo más bello que el ser humano ha recibido, que es la vida misma. Por ello, permítanme compartir con ustedes algunos principios que yo misma estoy aprendiendo junto a mi familia, esperando que les sean útiles para obtener resultados diferentes:

1.- Todos los aspectos de nuestra vida necesitan la planeación, si queremos construir un patrimonio, tener hijos, hacer un viaje, las tareas en casa, la educación de los hijos, etc..., será una tarea más sencilla si se sienta junto a su cónyuge a planear y organizar aquello que desean conquistar.

2.- No gaste todo lo que recibe de ingresos. Ésta es un área en la que muchas familias mexicanas sufren por falta de sabiduría en el manejo de sus finanzas. Ahorre, guarde para lo imprevisto, para algún proyecto especial en el que use su dinero y no el dinero del Banco, porque le saldrá mucho más caro. Sea paciente, no se deje llevar por la publicidad y eso de los pagos chiquitos… ¡es un espejismo!

3.- Su familia son su cónyuge y sus hijos, ¡los demás son parientes! Este principio quizás será una ofensa para muchos, porque como pueblo mexicano tenemos la fuertísima costumbre de cargar con todo el clan de la familia. Tristemente, he visto a muchísima gente con tremendos problemas físicos, financieros y de familia, por traer a toda la parentela arriba de su espalda. Usted se preguntará: Y entonces, ¿qué hago con ellos? Mire, no les estoy diciendo que se olviden de sus parientes, simple y sencillamente quiero ayudarles a ordenar sus prioridades. Desde esta perspectiva, su cónyuge y sus hijos deben ser su prioridad para su tiempo, sus finanzas y su devoción, luego si tiene oportunidad de apoyar a sus padres, hágalo con la seguridad que está sembrando el ejemplo para después cosecharlo de sus propios hijos. Y si después de esto tiene la posibilidad de apoyar a alguien más, lo puede hacer, pero sin poner en riesgo el bienestar de los suyos.

4.- Aprenda todo lo que pueda. Actualmente, gracias al internet, existen oportunidades ilimitadas de aprender, de investigar y adquirir conocimientos. Si usted ha tenido el deseo de realizar algo, pero no se ha sentido preparado para ello, ésta es su oportunidad para capacitarse, de seguro esto lo hará más productivo.

5.- Cuide su corazón, porque de él viene la vida. Esto aplica en dos aspectos: En la salud, porque el corazón es un órgano tan delicado, pero no pensamos en él, hasta que alguien cercano muere repentinamente o hasta que sentimos dolor en el pecho. Hagamos un compromiso serio de cuidar nuestra salud, ésta nos dará la base para hacer todo lo demás. El otro aspecto tiene que ver con sus emociones y con sus sentimientos, sea rápido para perdonar al que lo ha ofendido, no se ofenda usted por lo que le hagan otros, suelte el pasado, perdónese por lo malo que haya hecho y procure rectificar, es más, propóngase retribuir a aquellos a quienes usted haya defraudado. La vida le está dando una nueva oportunidad, ¡¡aprovéchela!!

Los mexicanos somos un pueblo extraordinario que tenemos el potencial de transformar nuestro entorno, pero ahora necesitamos enfocarnos en hacer cambios en nuestro interior para obtener resultados diferentes y mejores. Por mi parte, les deseo con todo mi corazón que la luz del creador ilumine sus caminos con sabiduría y les prodigue toda clase de bendiciones. ¡Que la fe, la esperanza y el amor reinen en sus hogares… Feliz año 2020!

¡Hasta la próxima!

Elsitacruzita@gmail.com

Twitter: @ElsaCruzGuevara

2020: Año de cambios significativos


Con toda seguridad mis queridos lectores, en los últimos días y gracias a las redes sociales todos hemos leído y escuchado toda clase de felicitaciones y buenos deseos de felicidad para este nuevo año 2020, del que, gracias a Dios, ya estamos disfrutando. Estas felicitaciones han sido tan variadas que van desde las más emotivas y elocuentes hasta las más chuscas y ocurrentes que logran arrancarnos unas carcajadas sin importar dónde nos encontremos.

También, en los días previos a la llegada del nuevo año los medios dedicaron muchas horas para dar o recibir consejos para que nos vaya bien en el amor, la salud, las finanzas, etc…, que si el calzón rojo, que si el amarillo, que si barrer o trapear, que si las velas, que si los decretos, que si las uvas, que si las monedas… y la lista sigue y sigue. Les confieso que al escuchar algunos de estos tips he reflexionado en la evidente necesidad que tiene el ser humano de asegurar un buen futuro, de ese deseo de vivir bien y tener esperanza. La verdad es que ese deseo es legítimo, está en nuestro ADN; todo nuestro ser clama por salud, por vida, por prosperidad, por amor y paz, por trascendencia, por un propósito para vivir. Pero la pregunta del millón es: ¿Qué tan dispuestos estamos para hacer algo diferente en nuestro día a día, que nos produzca resultados diferentes a los que obtuvimos en el 2019? Hay una frase muy famosa que se le atribuye al asombroso científico e inventor Albert Einstein que dice: “Locura es hacer la misma cosa una y otra vez, esperando resultados diferentes”, estas palabras nos retan para hacer cambios significativos en nuestra vida, si realmente queremos vivir mejor, porque podremos hacer todos los rituales de buena suerte que conozcamos, pero la clave de todo está en cómo vivimos diariamente y cómo sembramos en nuestra propia vida y en la de otros, porque de ellos recibiremos un resultado, un fruto bueno o malo. Queridos lectores, no pretendo saberlo todo, ni siquiera quiero ponerme como ejemplo delante de ustedes, simplemente deseo que todos sean realmente felices durante este año, que disfruten el regalo más bello que el ser humano ha recibido, que es la vida misma. Por ello, permítanme compartir con ustedes algunos principios que yo misma estoy aprendiendo junto a mi familia, esperando que les sean útiles para obtener resultados diferentes:

1.- Todos los aspectos de nuestra vida necesitan la planeación, si queremos construir un patrimonio, tener hijos, hacer un viaje, las tareas en casa, la educación de los hijos, etc..., será una tarea más sencilla si se sienta junto a su cónyuge a planear y organizar aquello que desean conquistar.

2.- No gaste todo lo que recibe de ingresos. Ésta es un área en la que muchas familias mexicanas sufren por falta de sabiduría en el manejo de sus finanzas. Ahorre, guarde para lo imprevisto, para algún proyecto especial en el que use su dinero y no el dinero del Banco, porque le saldrá mucho más caro. Sea paciente, no se deje llevar por la publicidad y eso de los pagos chiquitos… ¡es un espejismo!

3.- Su familia son su cónyuge y sus hijos, ¡los demás son parientes! Este principio quizás será una ofensa para muchos, porque como pueblo mexicano tenemos la fuertísima costumbre de cargar con todo el clan de la familia. Tristemente, he visto a muchísima gente con tremendos problemas físicos, financieros y de familia, por traer a toda la parentela arriba de su espalda. Usted se preguntará: Y entonces, ¿qué hago con ellos? Mire, no les estoy diciendo que se olviden de sus parientes, simple y sencillamente quiero ayudarles a ordenar sus prioridades. Desde esta perspectiva, su cónyuge y sus hijos deben ser su prioridad para su tiempo, sus finanzas y su devoción, luego si tiene oportunidad de apoyar a sus padres, hágalo con la seguridad que está sembrando el ejemplo para después cosecharlo de sus propios hijos. Y si después de esto tiene la posibilidad de apoyar a alguien más, lo puede hacer, pero sin poner en riesgo el bienestar de los suyos.

4.- Aprenda todo lo que pueda. Actualmente, gracias al internet, existen oportunidades ilimitadas de aprender, de investigar y adquirir conocimientos. Si usted ha tenido el deseo de realizar algo, pero no se ha sentido preparado para ello, ésta es su oportunidad para capacitarse, de seguro esto lo hará más productivo.

5.- Cuide su corazón, porque de él viene la vida. Esto aplica en dos aspectos: En la salud, porque el corazón es un órgano tan delicado, pero no pensamos en él, hasta que alguien cercano muere repentinamente o hasta que sentimos dolor en el pecho. Hagamos un compromiso serio de cuidar nuestra salud, ésta nos dará la base para hacer todo lo demás. El otro aspecto tiene que ver con sus emociones y con sus sentimientos, sea rápido para perdonar al que lo ha ofendido, no se ofenda usted por lo que le hagan otros, suelte el pasado, perdónese por lo malo que haya hecho y procure rectificar, es más, propóngase retribuir a aquellos a quienes usted haya defraudado. La vida le está dando una nueva oportunidad, ¡¡aprovéchela!!

Los mexicanos somos un pueblo extraordinario que tenemos el potencial de transformar nuestro entorno, pero ahora necesitamos enfocarnos en hacer cambios en nuestro interior para obtener resultados diferentes y mejores. Por mi parte, les deseo con todo mi corazón que la luz del creador ilumine sus caminos con sabiduría y les prodigue toda clase de bendiciones. ¡Que la fe, la esperanza y el amor reinen en sus hogares… Feliz año 2020!

¡Hasta la próxima!

Elsitacruzita@gmail.com

Twitter: @ElsaCruzGuevara