/ lunes 4 de enero de 2021

CONTRASENTIDO

Propósitos a propósito




El fin de una vuelta de la tierra al sol presupone el fin de una era llamada año y con ello abre un espacio ideal para la reflexión personal sobre lo hecho y sobre lo que se debe mejorar. Bajo esas circunstancias nacen los famosos propósitos de Año Nuevo, que buscan desarrollar la personalidad en un espacio de mejora continua. Aunque cualquier fecha es buena para ser mejor persona, la realidad es que debemos aprovechar la inercia y generalidad de estas fechas para armonizar nuestros propósitos a propósito.

Nadie mejor que nosotros nos conocemos y sabemos lo que deseamos ser o hacia dónde vamos. Entonces, no pueden existir consejos o principios que nos ayuden a definir nuestros propósitos, sin embargo sí se puede mejorar en cuanto al cumplimiento de éstos, si tenemos una mayor conciencia de lo que estamos haciendo.

En ese sentido debemos poner una mayor atención al proceso que al resultado. Es decir, para lograr que nuestros propósitos se cumplan, tendremos que hacer una serie de acciones para lograrlo y estas acciones son la clave de los logros porque representan aprendizajes para la persona. Estos aprendizajes son en realidad hábitos que marcan el destino de cada persona en todos los ámbitos y no sólo en los propósitos que nos pusimos. Por ejemplo, si una persona tiene como propósito leer en 2021 para mejorar sus habilidades cognitivas, tendrá que realizar un espacio en su agenda de actividades para dedicarle el tiempo suficiente de una forma cotidiana para lograr lo planeado. Lo anterior se convierte en un hábito que exige disciplina y constancia, lo anterior quedará en el baúl de virtudes de la persona que cada día las cultiva y que habitualmente las tendrá disponibles para cualquier tarea o dificultad que se le presente en la vida.

Si somos capaces de poner atención y comprender lo que implica cada propósito a propósito, tendremos mejores condiciones para aprovechar las oportunidades que la vida nos dé y para solucionar problemas complejos y cotidianos que irremediablemente son parte de las vicisitudes del lapso que nos toca estar llamado vida. Así que la única recomendación en estas fechas es cultivar los hábitos que nos permitan poder poner en manifiesto todas nuestras virtudes para explotar mejor todas las posibilidades que tenemos. A final de cuentas, ya estamos aquí y es nuestra obligación ser mejores personas para poder crear mejores condiciones para todos.

@GildardoLinarez

glinarez@hotmail.com

Propósitos a propósito




El fin de una vuelta de la tierra al sol presupone el fin de una era llamada año y con ello abre un espacio ideal para la reflexión personal sobre lo hecho y sobre lo que se debe mejorar. Bajo esas circunstancias nacen los famosos propósitos de Año Nuevo, que buscan desarrollar la personalidad en un espacio de mejora continua. Aunque cualquier fecha es buena para ser mejor persona, la realidad es que debemos aprovechar la inercia y generalidad de estas fechas para armonizar nuestros propósitos a propósito.

Nadie mejor que nosotros nos conocemos y sabemos lo que deseamos ser o hacia dónde vamos. Entonces, no pueden existir consejos o principios que nos ayuden a definir nuestros propósitos, sin embargo sí se puede mejorar en cuanto al cumplimiento de éstos, si tenemos una mayor conciencia de lo que estamos haciendo.

En ese sentido debemos poner una mayor atención al proceso que al resultado. Es decir, para lograr que nuestros propósitos se cumplan, tendremos que hacer una serie de acciones para lograrlo y estas acciones son la clave de los logros porque representan aprendizajes para la persona. Estos aprendizajes son en realidad hábitos que marcan el destino de cada persona en todos los ámbitos y no sólo en los propósitos que nos pusimos. Por ejemplo, si una persona tiene como propósito leer en 2021 para mejorar sus habilidades cognitivas, tendrá que realizar un espacio en su agenda de actividades para dedicarle el tiempo suficiente de una forma cotidiana para lograr lo planeado. Lo anterior se convierte en un hábito que exige disciplina y constancia, lo anterior quedará en el baúl de virtudes de la persona que cada día las cultiva y que habitualmente las tendrá disponibles para cualquier tarea o dificultad que se le presente en la vida.

Si somos capaces de poner atención y comprender lo que implica cada propósito a propósito, tendremos mejores condiciones para aprovechar las oportunidades que la vida nos dé y para solucionar problemas complejos y cotidianos que irremediablemente son parte de las vicisitudes del lapso que nos toca estar llamado vida. Así que la única recomendación en estas fechas es cultivar los hábitos que nos permitan poder poner en manifiesto todas nuestras virtudes para explotar mejor todas las posibilidades que tenemos. A final de cuentas, ya estamos aquí y es nuestra obligación ser mejores personas para poder crear mejores condiciones para todos.

@GildardoLinarez

glinarez@hotmail.com