Semana de vacunación
JERINGAS Y CHAROLAS… De acuerdo con lo que manda la tradición, sin duda ésta debe ser una semana de intensa vacunación. Está demás decir que no nos estamos refiriendo a la vacuna contra Covid-19, sino al pase de charola de los equipos de los candidatos de gobernador. Alfonso Durazo es quien menos problema tiene en este momento, como candidato oficial goza respaldo de las altas esferas de la presidencia y pasar el cepo de las limosnas no representa el mayor problema. Ernesto Gándara ya conoce el camino y aprovechando la triple alianza, seguramente tocó puertas en otros estados. Para Ricardo Bours, el tema financiero no es problema, su familia tiene para hacer hasta una campaña presidencial. Pero sobre todo sus contactos en el mundo empresarial. La bronca es para la chiquillada, que no les quedará otra que arrimarse a un árbol que dé buena sombra. Y más vale para tener con qué arrancar en tiempo y forma.
SALDRÁN MÁS BARATAS… Hay quienes dicen que por la situación de la pandemia las campañas saldrán más baratas, porque ya no habrá los grandes eventos multitudinarios y todo tendrá que hacerse por aire o sea publicidad y promoción en redes, sobre todo. Ahí es donde Bours Castelo se ha visto muy activo y con inversiones estratégicas. Sin embargo, la campaña de tierra saldrá más cara, porque si bien es cierto que los mensajes llegarán por la red, el amarre tiene que hacerse a la antigüita, en corto. Aquí aventaja Morena al disponer de la estructura de los Servidores de la Nación. Que dicho sea de paso, seguramente ya fueron ajustados para no recibir otro desastre electoral como el de Hidalgo y Coahuila. Actualmente estos chavos han ido perdiendo ascendiente popular, porque los usan en la vacunación y bueno, de eso poco saben y en ocasiones hasta regañan a la gente y le echan en cara que no sean desagradecidos, porque las vacunas “son un regalo del gobierno”. Seguramente lo ponen de su bolsa.
LA AGENDA ELECTORAL… También en esta semana se terminan de ajustar las agendas electorales y las estrategias de ataque y defensa. Morena ya mostró parte de su arsenal y se irá con todo contra la fortaleza que tiene la triple alianza, que son los gobernantes. Algo que seguramente contestarán los aliancistas con más virulencia. Ricardo Bours ha insistido mucho en despertar el orgullo sonorense, pero es un tema que a lo mejor no le alcanza, porque en este momento el concepto es de sobrevivencia, no de presumir primeros lugares. Y la chiquillada, pues veremos cómo se define. Los malpensados dicen que serán las chicas del coro para atacar a la gobernadora y los candidatos aliancistas. No olvidar que en esta ocasión contenderán once partidos, seis candidatos y dos alianzas.
RESIDENCIA Y VECINDAD… Uno de los flancos débiles que tiene Alfonso Durazo al iniciar la campaña es su desarraigo. Algo que han sabido aprovechar sus adversarios. De ahí su insistencia en estas últimas semanas de marcar su origen en Bavispe. Aunque por otro lado, muchos lo perciben como don Rodolfo Félix Valdés, un sonorense que se quedó demasiado en el centro del país, algo que no representa el mínimo problema para Gándara o para Bours. Ahora, quién sabe si el factor regionalismo influya tanto en la intención del voto o más bien en generar ambientes de confianza, porque no es lo mismo de sonorense a sonorense, que de Guachinton a Sonora. Ni modo, tendrá que recurrir al viejo método de ir a los tacos y al café de doña Elvira. Baño de pueblo sonorense, no queda otra.
