Corren los caballitos
LOS GRANDOTES Y LOS CHIQUITOS... Así decía Cri Cri en la canción de “Los Caballitos”. Bueno, pues para zafarse de la agenda mediática que le estaba poniendo el periodista Jorge Ramos, de Univision, con el tema de la violencia en México. Y para el solaz de la raza, el presidente Andrés Manuel López Obrador optó por hacer un nuevo destape de sus posibles sucesores, y aunque advirtió que eso lo va decidir el pueblo, soltó varios nombres, que si bien es cierto que hasta antes del desastre de la Ruta 12 del Metro un par tenían peso político, la cosa cambió y bueno, los que dio a conocer los tiene que poner ahora bajo el manto protector de la marca de Morena y la 4T porque ahorita no llenan el ojo de nadie.
LA CABALLADA ESTÁ FLACA… El presidente dijo que su posible sucesor está entre esta tanda. En primer lugar colocó a su favorita, cuando menos eso aparenta, Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno de la CDMX. Aunque ya vieron la derrota que tuvo en las alcaldías de la capital. Luego siguió el canciller Marcelo Ebrard, que de estar arriba ahora anda alicaído por el mismo problema del Metro. En tercero está Juan Ramón de la Fuente, excelente académico, buen trabajo como embajador ante la ONU. Comprometido con la 4T pero no chairo. Muy arropado podría funcionar. Esteban Moctezuma, embajador de México en USA. Descártelo, porque sería tanto como darle el control del país a Ricardo Salinas. Tatiana Clouthier, secretaria de Economía, es bien vista por empresarios. No es del grupo de los chairos. Pero tiene poco ascendiente en Morena. También incluyó, y ahí quién sabe si fue por mera cortesía, a Rocío Nahle, secretaria de Energía. Y claro, hay que poner también al tapado como se hacía antes.
¿Y LOS GOBERNADORES? Curioso que nunca nombre a algún gobernador de Morena a excepción de Claudia Sheinbaum, porque es casi seguro que su candidato se tenga que enfrentar a Enrique Alfaro, gobernador de Jalisco, por Movimiento Ciudadano. En el PAN hay gobernadores que han levantado la mano. En esta lista aparecen figuras con rango nacional como es el caso de Alfonso Durazo y... Y creo que es único. A lo mejor por eso. No olvidar que muchos presidentes, comenzando por el propio López Obrador, fueron gobernadores. Y casos abundan, como Plutarco Eláis Calles, Emilio Portes Gil de Tamaulipas. Lázaro Cárdenas, lo fue de Michoacán. Miguel Alemán y Adolfo Ruiz Cortines de Veracruz. Y bueno, a lo mejor los ponen en la palestra en el 2023, cuando ya cuajen un poco más.
LOS QUE FALTARON.. .Desde luego que no pasó desapercibido por la clase política, sobre todo los que no lo pasan, el hecho de que no fuera nombrado en esta lista Ricardo Monreal, coordinador de los senadores de Morena. ¿La razón? Que puede estar castigado por jugar contras en las pasadas elecciones. Por cuidarlo y no acelerarlo ahora que tiene mucho trabajo para sacar adelante las iniciativas del presidente. Vaya usted a saber. Otro que ignorado olímpicamente fue Mario Delgado y el Dr. Muerte, Hugo López-Gatell quien se siente presidenciable. No sabemos por qué pero actúa como si lo fuera.
EL PERFIL DEL TAPADO... Ahora bien, cuál el perfil del tapado de la 4T. Dice el presidente López Obrador que ya no será como antes, que el pueblo decidirá. Caray, es un bocado muy difícil de tragar. Pero bueno. Suponiendo que solo sea el fiel de balanza, como decía José López Portillo, o el único voto que falta, como decía Jesús Silva Herzog, ¿sobre quién se inclinaría? Uno a su imagen y semejanza, pero de lealtad probada, como pasó con Hugo Chávez y Maduro. O alguien de acuerdo al ambiente y escenario que haya en el país en ese momento. Recordar que esta fue la decisión que tomó el presidente Lázaro Cárdenas. Cuando todos esperaban que nombrara a su alter ego el general Francisco J. Múgica, gente de izquierda. Sin embargo, el horno que era México no estaba para bollos, por eso dijo aquella famosa declaración años después: “El señor general Múgica, mi muy querido amigo, era un radical ampliamente conocido. Habíamos sorteado una guerra civil ( la Cristiada) y soportábamos la consecuencias de la expropiación petrolera, una presión terrible. ¿Para qué un radical?
¿RADICAL O MODERADO?... Es posible que el presidente López Obrador esté en esa misma situación, porque al declarar la guerra a la clase media, los empresarios y hasta la misma iglesia. El haber perdido votos y diputaciones federales, lo puede convencer de que los radicales podrían terminar dividiendo al país y generar una conflagración tan grande, en donde tendría que tomar partido quisiera o no, que su legado que hasta ahora le vale un sitio en la historia oficial, termine por irse como otros gobiernos al basurero de la historia. Una decisión nada fácil, pero tiene el tiempo a su favor no sólo para elegir, sino para construir la candidatura de su sucesor. Claro que todo dependerá si logra mantener la unidad de su partido, al que se lo está comiendo la ambición personal de muchos liderazgos. Ya dijo que lo que le preocupa, más que la consulta de revocación de mandato, “me preocupa más la ciencia y el Creador”. Uyyy, mensaje de profundidad.
CHANGARRO ALBOROTADO... Y miren que Morena se ha vuelto un changarro alborotado, en donde todos quieren pan para que les den un hueso. De ahí que las guerras internas cada vez suben de nivel, por eso el llamado del presidente a que “dejen a un lado la politiquería y no pensar en los cargos para que se pueda darle continuidad al movimiento de transformación en favor del pueblo de México”. Con rebeliones en varias partes, incluyendo la propia capital, contra Mario Delegado. Pleito entre precandidatos. Zacandillas en el gabinete. Los primeros actos de corrupción que se volverá una bola de nieve y ya entrados en el gusto del billete, quién los para. Nada, pero nada fácil.
En fin, como dijo Pepe Botella: “Ni son todos los que están, ni están todos los que pueden levantar la mano”. Sale.
