/ domingo 3 de enero de 2021

En las buenas y en las malas

¡Me siento muy feliz y agradecida con Dios por haber llegado a un nuevo día y a un nuevo año! Al 2021, en el que millones de personas han puesto todas sus esperanzas que nos deparen mejores condiciones de salud y bienestar; libres de pandemia y con una próspera economía para todas las familias del mundo. Qué bueno que hemos hecho nuevos propósitos para ser mejores individuos con la intención de cumplir nuestros roles como miembros de una familia y de la sociedad en la que nos toca vivir. A propósito, si usted es de los que todavía no tienen sus 12 buenos propósitos o su lista de sueños para este año, aún está a tiempo de escribirlos en una hoja y pegarla junto a su espejo para que los pueda leer cada día, con el firme compromiso de dar pequeños pasos para su logro.

Si algo nos ha enseñado el año que recién terminó es que la vida nos puede sorprender, que nada está escrito ni seguro y tanto en el matrimonio como en lo familiar hay de todo, hay buenas temporadas que nos hacen felices, pero hay malas temporadas en las que seremos lastimados y al mismo tiempo tendremos la oportunidad de asimilar el dolor, de cambiar lo que nos destruye y de salir aún más fuertes para continuar haciendo nuestro camino al andar.

Es verdad que a todos nos gusta tener una buena vida, de hecho nos esforzamos desde pequeños en construir un buen futuro, estudiamos, trabajamos sin descanso, compramos, vendemos, planeamos y trabajamos aún más, pero difícilmente nos hacemos a la idea que en cualquier momento pueden llegar enfermedades, pérdidas, tragedias, traiciones, divorcios y escasez y muy pocos se quedan cuando las dificultades llegan a casa, cuando ellas entran por la puerta, el amor de muchos sale por la ventana. Usted podrá decirme: “¡Es que no me gusta ser probado!”, ¿pero sabe que el amor y la perseverancia son dos cosas que de seguro serán probados en su vida? Las pruebas o dificultades tienen ese propósito, purificar las cosas, retirar lo que no es genuino ni de beneficio para nosotros y nos revelan lo que hay en nuestro corazón. ¿Quiere conocer realmente a una persona? Observe lo que hace, lo que dice y lo que siente en medio de la prueba, porque es cuando se revela lo que hay en su interior. Si el oro y la plata se tienen que refinar por medio del fuego, también nosotros tendremos que pasar por un proceso similar, para ser pulidos y creo que en parte ése fue el propósito del año pasado, ayudarnos a ser mejores esposos, mejores hijos, mejores padres y mejores seres humanos.

Este año proponga en su corazón vivir cada día al máximo, arrepentido sí, por lo que no hizo o por lo que hizo mal el año pasado y determine no cometer los mismos errores, sea agradecido con Dios por lo que recibió, aun por los golpes bajos que le dio este año, porque si está vivo, quiere decir que hoy usted es más fuerte; deje atrás el daño que le hicieron y perdone; vuelva a creer, aunque no sea fácil; reviva sus alegrías y los más bellos momentos con su cónyuge y con sus hijos, renueve su promesa que en las buenas y en las malas los va a amar con todas sus fuerzas. Renueve ese mismo compromiso con sus padres, con sus amigos y con el Dios misericordioso que nos permite seguir viviendo un año más. Que en las buenas y en las malas sigamos conectados con él. \u0009

Gracias por su amable compañía… ¡Y feliz 2021 para todos!


¡Me siento muy feliz y agradecida con Dios por haber llegado a un nuevo día y a un nuevo año! Al 2021, en el que millones de personas han puesto todas sus esperanzas que nos deparen mejores condiciones de salud y bienestar; libres de pandemia y con una próspera economía para todas las familias del mundo. Qué bueno que hemos hecho nuevos propósitos para ser mejores individuos con la intención de cumplir nuestros roles como miembros de una familia y de la sociedad en la que nos toca vivir. A propósito, si usted es de los que todavía no tienen sus 12 buenos propósitos o su lista de sueños para este año, aún está a tiempo de escribirlos en una hoja y pegarla junto a su espejo para que los pueda leer cada día, con el firme compromiso de dar pequeños pasos para su logro.

Si algo nos ha enseñado el año que recién terminó es que la vida nos puede sorprender, que nada está escrito ni seguro y tanto en el matrimonio como en lo familiar hay de todo, hay buenas temporadas que nos hacen felices, pero hay malas temporadas en las que seremos lastimados y al mismo tiempo tendremos la oportunidad de asimilar el dolor, de cambiar lo que nos destruye y de salir aún más fuertes para continuar haciendo nuestro camino al andar.

Es verdad que a todos nos gusta tener una buena vida, de hecho nos esforzamos desde pequeños en construir un buen futuro, estudiamos, trabajamos sin descanso, compramos, vendemos, planeamos y trabajamos aún más, pero difícilmente nos hacemos a la idea que en cualquier momento pueden llegar enfermedades, pérdidas, tragedias, traiciones, divorcios y escasez y muy pocos se quedan cuando las dificultades llegan a casa, cuando ellas entran por la puerta, el amor de muchos sale por la ventana. Usted podrá decirme: “¡Es que no me gusta ser probado!”, ¿pero sabe que el amor y la perseverancia son dos cosas que de seguro serán probados en su vida? Las pruebas o dificultades tienen ese propósito, purificar las cosas, retirar lo que no es genuino ni de beneficio para nosotros y nos revelan lo que hay en nuestro corazón. ¿Quiere conocer realmente a una persona? Observe lo que hace, lo que dice y lo que siente en medio de la prueba, porque es cuando se revela lo que hay en su interior. Si el oro y la plata se tienen que refinar por medio del fuego, también nosotros tendremos que pasar por un proceso similar, para ser pulidos y creo que en parte ése fue el propósito del año pasado, ayudarnos a ser mejores esposos, mejores hijos, mejores padres y mejores seres humanos.

Este año proponga en su corazón vivir cada día al máximo, arrepentido sí, por lo que no hizo o por lo que hizo mal el año pasado y determine no cometer los mismos errores, sea agradecido con Dios por lo que recibió, aun por los golpes bajos que le dio este año, porque si está vivo, quiere decir que hoy usted es más fuerte; deje atrás el daño que le hicieron y perdone; vuelva a creer, aunque no sea fácil; reviva sus alegrías y los más bellos momentos con su cónyuge y con sus hijos, renueve su promesa que en las buenas y en las malas los va a amar con todas sus fuerzas. Renueve ese mismo compromiso con sus padres, con sus amigos y con el Dios misericordioso que nos permite seguir viviendo un año más. Que en las buenas y en las malas sigamos conectados con él. \u0009

Gracias por su amable compañía… ¡Y feliz 2021 para todos!