/ sábado 21 de mayo de 2022

Es mejor ocultar que transparentar; así gobierna la 4T

El pasado lunes, la Suprema Corte de Justicia de la Nación reservó por cinco años la información sobre los contratos realizados por el Gobierno Federal para la obtención de las vacunas por Covid-19. Lo que resulta preocupante porque hasta el momento el presidente de la República ha presumido que la transparencia es primero, por que una vez más se exhibe la simulación de la Cuarta Transformación.


Cuando un gobierno decide reservar la información la única opción que se tiene sobre esta situación es pensar mal, porque para eso es la transparencia, sobre todo para saber cuánto costó al gobierno la adquisición del biológico, que, si bien es cierto, se agradece el hecho de que los mexicanos, en teoría no sacamos dinero para pagar la vacuna, es decir fue gratis. Pero aún así es importante saber el monto de las compras.


Una vez más el presidente López Obrador engaña a los mexicanos. No podemos permitir que esta situación se siga presentando en este gobierno, porque si bien dice que uno de los valores principales es la honestidad, entonces en dónde está ya que es bien sabido que la transparencia va pegado al valor de la honestidad.


Se dice en medios de comunicación que esta decisión es por los acuerdos de confidencialidad suscritos con las farmacéuticas, esto para no divulgar sus secretos industriales y comerciales, situación que no es necesario caer a la decisión tal exagerada pues bien se pudieron hacer apartados, ya que al final de cuentas esas vacunas se compraron con el dinero de los mexicanos.


En ese sentido es importante que este tipo de acciones no se permitan, pero sobre todo que la Suprema Corte de Justicia de la Nación no solape las peticiones del presidente. Quizá sí reservar la parte de los secretos industriales, pero no el monto destinado a la compra, eso sí debería transparentarse, sobre todo si el Gobierno Federal seguirá comprando el biológico para continuar con el proceso de reforzar las dosis aplicadas en las personas.


La fecha límite para reservar la información es en diciembre 2025, es decir un año después de la salida de López Obrador de la presidencia, es decir, nadie lo va a molestar en lo que resta de su mandato con este tema, pues es más importante callar que transparentar y ese es el mensaje que deja la Cuarta “Transformación”.


El pasado lunes, la Suprema Corte de Justicia de la Nación reservó por cinco años la información sobre los contratos realizados por el Gobierno Federal para la obtención de las vacunas por Covid-19. Lo que resulta preocupante porque hasta el momento el presidente de la República ha presumido que la transparencia es primero, por que una vez más se exhibe la simulación de la Cuarta Transformación.


Cuando un gobierno decide reservar la información la única opción que se tiene sobre esta situación es pensar mal, porque para eso es la transparencia, sobre todo para saber cuánto costó al gobierno la adquisición del biológico, que, si bien es cierto, se agradece el hecho de que los mexicanos, en teoría no sacamos dinero para pagar la vacuna, es decir fue gratis. Pero aún así es importante saber el monto de las compras.


Una vez más el presidente López Obrador engaña a los mexicanos. No podemos permitir que esta situación se siga presentando en este gobierno, porque si bien dice que uno de los valores principales es la honestidad, entonces en dónde está ya que es bien sabido que la transparencia va pegado al valor de la honestidad.


Se dice en medios de comunicación que esta decisión es por los acuerdos de confidencialidad suscritos con las farmacéuticas, esto para no divulgar sus secretos industriales y comerciales, situación que no es necesario caer a la decisión tal exagerada pues bien se pudieron hacer apartados, ya que al final de cuentas esas vacunas se compraron con el dinero de los mexicanos.


En ese sentido es importante que este tipo de acciones no se permitan, pero sobre todo que la Suprema Corte de Justicia de la Nación no solape las peticiones del presidente. Quizá sí reservar la parte de los secretos industriales, pero no el monto destinado a la compra, eso sí debería transparentarse, sobre todo si el Gobierno Federal seguirá comprando el biológico para continuar con el proceso de reforzar las dosis aplicadas en las personas.


La fecha límite para reservar la información es en diciembre 2025, es decir un año después de la salida de López Obrador de la presidencia, es decir, nadie lo va a molestar en lo que resta de su mandato con este tema, pues es más importante callar que transparentar y ese es el mensaje que deja la Cuarta “Transformación”.