/ domingo 8 de agosto de 2021

FE Y RAZÓN

LOS MAESTROS SON COMO LA LUNA


Ser maestro, tiene como la luna su cara luminosa y su cara oscura. Recuerdo cuando leí esta carta hace muchos años me impresiono pues describe muy bien la vida y vocación de ser maestro. Comparto este pequeño extracto que se llama carta a un maestro por Pablo Latapí Sarre.

LADO OSCURO DE SER MAESTRO: el lado oscuro se refiere al bajo sueldo de un maestro, el poco reconocimiento social que hoy tiene, lo penoso y lamentable que dejó de ser admirado, dejo de ser apreciado y valorado su esfuerzo y dedicación, se convirtió en un trabajador al servicio del niño o estudiante. Hay además corrupción en el medio magisterial; como reglas de juego poco edificantes que tienen que aceptar; a veces manipulación, abusos y aunque no es privativo de la profesión, se ven rivalidades, murmuraciones, envidias y zancadillas de algunos compañeros.

Junto a este lado oscuro si le puede añadir la pobreza del alumno que hoy en día se le dificulta mucho aprender, que se vuelve testarudo y arrogante, poco disciplinado y rebelde con el profesor, o sumarle la ignorancia de los padres de familia que no saben cómo estimularlos ni corregirlos y en esta plataforma virtual imposible siquiera de saber quiénes son sus amigos o conocidos, factores como la televisión, música, videos, cantantes de moda y por si fuera poco en medio de un mundo sideral de información y distracción que se vive a través de internet, hoy se termina culpando al maestro de que los alumnos no aprendan.

LADO LUMINOSO DE SER MAESTRO. La experiencia de ver aprender es el preciso momento en que las letras se convierten en palabras y estas en pensamientos, es ver una chispa que estremece al niño y al adulto por igual, que sonríen con expresión de triunfo, ser maestro, es ser invitado a entrar en el alma de un alumno para ayudarle a encontrarse, a afirmar paulatinamente su carácter y descubrir sus emociones, quizá a superar sus temores y angustias. Ser maestro es seguir creciendo, seguir preparando y seguir soportando por amor a la vocación de enseñar y formar.

Estamos a punto de volver a clases, entre la incertidumbre de ser presencial o virtual, es de admirar y respetar la figura del maestro, pues desde su trinchera siguió dando clase y formación, lamentable para todos los docentes que trabajan en sector privado o colegios particulares y que no han sido recontratados o los miles de estudiantes que terminaron su carrera en Educación y Pedagogía y no han podido acomodarse en el sistema educativo, sin duda se tiene una fuerte crisis en el sistema de educación en México y que decir de los templos de la sabiduría que son las escuelas y que hoy en día se ven en situaciones de abandono. Suerte y que existan mejores estrategias y condiciones para los maestros.

LOS MAESTROS SON COMO LA LUNA


Ser maestro, tiene como la luna su cara luminosa y su cara oscura. Recuerdo cuando leí esta carta hace muchos años me impresiono pues describe muy bien la vida y vocación de ser maestro. Comparto este pequeño extracto que se llama carta a un maestro por Pablo Latapí Sarre.

LADO OSCURO DE SER MAESTRO: el lado oscuro se refiere al bajo sueldo de un maestro, el poco reconocimiento social que hoy tiene, lo penoso y lamentable que dejó de ser admirado, dejo de ser apreciado y valorado su esfuerzo y dedicación, se convirtió en un trabajador al servicio del niño o estudiante. Hay además corrupción en el medio magisterial; como reglas de juego poco edificantes que tienen que aceptar; a veces manipulación, abusos y aunque no es privativo de la profesión, se ven rivalidades, murmuraciones, envidias y zancadillas de algunos compañeros.

Junto a este lado oscuro si le puede añadir la pobreza del alumno que hoy en día se le dificulta mucho aprender, que se vuelve testarudo y arrogante, poco disciplinado y rebelde con el profesor, o sumarle la ignorancia de los padres de familia que no saben cómo estimularlos ni corregirlos y en esta plataforma virtual imposible siquiera de saber quiénes son sus amigos o conocidos, factores como la televisión, música, videos, cantantes de moda y por si fuera poco en medio de un mundo sideral de información y distracción que se vive a través de internet, hoy se termina culpando al maestro de que los alumnos no aprendan.

LADO LUMINOSO DE SER MAESTRO. La experiencia de ver aprender es el preciso momento en que las letras se convierten en palabras y estas en pensamientos, es ver una chispa que estremece al niño y al adulto por igual, que sonríen con expresión de triunfo, ser maestro, es ser invitado a entrar en el alma de un alumno para ayudarle a encontrarse, a afirmar paulatinamente su carácter y descubrir sus emociones, quizá a superar sus temores y angustias. Ser maestro es seguir creciendo, seguir preparando y seguir soportando por amor a la vocación de enseñar y formar.

Estamos a punto de volver a clases, entre la incertidumbre de ser presencial o virtual, es de admirar y respetar la figura del maestro, pues desde su trinchera siguió dando clase y formación, lamentable para todos los docentes que trabajan en sector privado o colegios particulares y que no han sido recontratados o los miles de estudiantes que terminaron su carrera en Educación y Pedagogía y no han podido acomodarse en el sistema educativo, sin duda se tiene una fuerte crisis en el sistema de educación en México y que decir de los templos de la sabiduría que son las escuelas y que hoy en día se ven en situaciones de abandono. Suerte y que existan mejores estrategias y condiciones para los maestros.