FE Y RAZÓN

Los estilos de familia y violencia

En los últimos 40 años, la familia ha cambiado en forma dramática: El porcentaje de mujeres casadas ha disminuido de 87 % a un 72 % la tasa de divorcio se ha triplicado, las mujeres han incrementado cuatro veces el tiempo de actividades extra domésticas, dejando a los hijos con poca supervisión. Cómo influye la familia en la conducta violenta. Existen tres tipos básicos de familia:

La familia Inflexible – violenta; en este tipo de familia lo más importante es el control, la obediencia, el cumplimiento de las reglas y una jerarquía estricta de poder, los niños son controlados y manipulados, y sus sentimientos son ignorados y negados. Los padres los amenazan constantemente, les gritan e incluso abusan físicamente de ellos. Sus características principales: El padre es la única autoridad y siempre gana. Y ante esta figura de autoridad los niños aprenden que quien manda tiene derecho hacerlo sin cuestionamiento y no importan el respeto ni la autoridad de las otras personas. Las reglas se cumplen a través de amenazas y castigos. El castigo físico es una de las conductas predilectas usada por los padres y el uso frecuente de la humillación y la ridiculización.

Familia inconsistente – débil. Este tipo de familia contraria a la anterior, carece de estructura firme y de aplicaciones de consecuencias disciplinarias, suele ser una familia inconsistente y débil donde prevalece una atmósfera permisiva y de total libertad sin límites. Los padres tratan de evitar cualquier tipo de trauma o fracaso de sus hijos, en esta familia no existe estructura, de modo que la hora de comer, dormir, bañarse o cumplir con las obligaciones de la casa se convierte en un tiempo de constante confrontación y lucha. Una característica de los padres es que empiezan a sentir ansiedad cuando se acercan las vacaciones o los días sin escuela.

Familia afectiva – estructurada. Este modelo de familia proporciona consistencia, ternura, firmeza y equidad, así como un ambiente ordenado y conciliador que los niños necesitan para desarrollar una personalidad estable y moral. Esta familia edifica sus relaciones a través de una libertad responsable, respeto y firmeza son los componentes responsables en este tipo de familia. A través del amor, de la aceptación y del sentimiento de pertenencia, los niños en esta familia son reconocidos, valorados y queridos. Los niños que reciben en su hogar mensaje de confianza, respeto y justicia desarrollaran una vida más feliz y una comunicación sincera y abierta a sus padres. Esta familia desarrolla en sus hijos habilidades y actitudes de optimismo, perseverancia y generosidad.

Hoy en día es importante analizar cómo estamos educando y formando a nuestros niños, poner atención en la supervisión del contenido que ven en las redes sociales, películas y música y que sean tóxicos y criminales en la formación de su conciencia y conducta. Siempre una persona optimista con sentimientos positivos es capaz de convertir situaciones negativas en situaciones positivas y de oportunidad y nunca se percibe como víctima. ATENCIÓN PORQUE LA VIOLENCIA SE ORIGINA EN CASA.