/ miércoles 3 de febrero de 2021

HABLEMOS DERECHO

Seguridad social a personas desempleadas



De acuerdo con las cifras actualizadas del IMSS, como resultado de la pandemia y las consecuencias económicas derivadas, durante el 2020, 647,710 personas perdieron su empleo. Del total, la mayor parte correspondió a empleos formales, pues se dieron de baja 560,473 puestos en la categoría. Además, 87,237 puestos de trabajo perdidos corresponden a la modalidad eventual.

Al terminar una relación laboral, las personas desempleadas también son dadas de baja del régimen obligatorio de cotización. En este caso, el aseguramiento por continuación voluntaria al régimen obligatorio les ofrece la posibilidad de continuar su cotización en dos de los cinco ramos de seguro del instituto.

Ante el amplio número de personas desempleadas y la necesidad de garantizar el acceso a servicios de salud, el Instituto Mexicano del Seguro Social cuenta con modalidades de aseguramiento para acceder a atención médica y continuar cotizando aún sin relación laboral.

Las personas desempleadas pueden acceder a seguridad social para el retiro, así como servicios de atención médica, a través de los Seguros por Invalidez, así como de Retiro, Cesantía y Vejez las personas pueden continuar realizando aportaciones a su cuenta individual y seguir acumulando semanas de cotización. El beneficio principal es poder acceder a una pensión en mejores condiciones económicas.

De acuerdo con el instituto, dicho modo de aseguramiento, también conocido como modalidad 40, es un derecho de las personas trabajadoras. Sin embargo, de no ejercerse en un plazo máximo de 5 años a partir de la baja, la contratación de la continuación voluntaria puede perderse.

Entre las condiciones establecidas por el IMSS destaca que los asegurados deben haber cotizado al menos 52 semanas en los últimos 5 años previos al momento de la pérdida del aseguramiento con el Instituto. En caso de interés por parte del extrabajador, podrá solicitar su continuación con base en el último salario registrado o con un salario mayor.

El trámite es gratuito y debido a las recomendaciones de las autoridades sanitarias, el instituto brinda la opción de solicitarlo a través de internet. En caso de realizarlo por este medio, será necesario contar con: CURP, Número de Seguridad Social y correo electrónico.

Una vez registrado en el sistema, también existe la posibilidad de realizar el pago de las cuotas a distancia. De esa forma, se puede realizar una transferencia bancaria a través del portal de la institución financiera o aplicación móvil.

Es importante precisar que el aseguramiento por continuación voluntaria al régimen obligatorio no otorga el acceso a la atención médica, sin embargo el Seguro de Salud para la Familia permite a cualquier persona asegurarse y hacer lo mismo con su núcleo familiar. De esa forma, la persona asegurada sí podrá tener acceso a toda la gama de servicios médicos, quirúrgicos, farmacéuticos, hospitalarios y de maternidad que brinda el IMSS.

Para acceder al esquema, la persona debe realizar el pago de una cuota anual por afiliado. Los precios varían, de acuerdo con la edad y pueden ir desde los 4,650 hasta los 12,750 pesos. Tanto el alta como el pago de la anualidad pueden realizarse a distancia con los mismos documentos requeridos para la modalidad 40.

Seguridad social a personas desempleadas



De acuerdo con las cifras actualizadas del IMSS, como resultado de la pandemia y las consecuencias económicas derivadas, durante el 2020, 647,710 personas perdieron su empleo. Del total, la mayor parte correspondió a empleos formales, pues se dieron de baja 560,473 puestos en la categoría. Además, 87,237 puestos de trabajo perdidos corresponden a la modalidad eventual.

Al terminar una relación laboral, las personas desempleadas también son dadas de baja del régimen obligatorio de cotización. En este caso, el aseguramiento por continuación voluntaria al régimen obligatorio les ofrece la posibilidad de continuar su cotización en dos de los cinco ramos de seguro del instituto.

Ante el amplio número de personas desempleadas y la necesidad de garantizar el acceso a servicios de salud, el Instituto Mexicano del Seguro Social cuenta con modalidades de aseguramiento para acceder a atención médica y continuar cotizando aún sin relación laboral.

Las personas desempleadas pueden acceder a seguridad social para el retiro, así como servicios de atención médica, a través de los Seguros por Invalidez, así como de Retiro, Cesantía y Vejez las personas pueden continuar realizando aportaciones a su cuenta individual y seguir acumulando semanas de cotización. El beneficio principal es poder acceder a una pensión en mejores condiciones económicas.

De acuerdo con el instituto, dicho modo de aseguramiento, también conocido como modalidad 40, es un derecho de las personas trabajadoras. Sin embargo, de no ejercerse en un plazo máximo de 5 años a partir de la baja, la contratación de la continuación voluntaria puede perderse.

Entre las condiciones establecidas por el IMSS destaca que los asegurados deben haber cotizado al menos 52 semanas en los últimos 5 años previos al momento de la pérdida del aseguramiento con el Instituto. En caso de interés por parte del extrabajador, podrá solicitar su continuación con base en el último salario registrado o con un salario mayor.

El trámite es gratuito y debido a las recomendaciones de las autoridades sanitarias, el instituto brinda la opción de solicitarlo a través de internet. En caso de realizarlo por este medio, será necesario contar con: CURP, Número de Seguridad Social y correo electrónico.

Una vez registrado en el sistema, también existe la posibilidad de realizar el pago de las cuotas a distancia. De esa forma, se puede realizar una transferencia bancaria a través del portal de la institución financiera o aplicación móvil.

Es importante precisar que el aseguramiento por continuación voluntaria al régimen obligatorio no otorga el acceso a la atención médica, sin embargo el Seguro de Salud para la Familia permite a cualquier persona asegurarse y hacer lo mismo con su núcleo familiar. De esa forma, la persona asegurada sí podrá tener acceso a toda la gama de servicios médicos, quirúrgicos, farmacéuticos, hospitalarios y de maternidad que brinda el IMSS.

Para acceder al esquema, la persona debe realizar el pago de una cuota anual por afiliado. Los precios varían, de acuerdo con la edad y pueden ir desde los 4,650 hasta los 12,750 pesos. Tanto el alta como el pago de la anualidad pueden realizarse a distancia con los mismos documentos requeridos para la modalidad 40.