/ lunes 19 de abril de 2021

Los jóvenes y la economía creativa

Las políticas públicas deben atender las problemáticas de la juventud, debido a que la cobertura en Sonora en educación superior es del 42% con una tasa de desocupación en rangos del 9.8%. Son los jóvenes los que más padecen el desempleo, el subempleo y los bajos salarios. De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), las personas jóvenes actualmente son las principales afectadas por la crisis económica provocada por la pandemia del coronavirus, en donde 1 de cada 6 se encuentra sin empleo.

Por otra parte, si analizamos con perspectiva de género la educación superior observamos las diferencias en cuánto a lo que estudian las y los jóvenes. La matricula de educación está compuesta por un 74.4% de mujeres y la de Tecnología de Información y comunicación un 75.3% por hombres, es decir las mujeres con una mayor tasa de educación que los hombres, eligen en un mayor porcentaje licenciaturas del área social y los hombres en ingenieras. Para ello se requieren cambios culturales con el fin de que en el futuro contar con un profesiones mejor balanceadas.

Consideramos que con la finalidad de impulsar el desarrollo económico y social en Sonora, se requiere requiere de cambios profundos en su estructura productiva, y que en esta transformación la juventud juega un papel muy importante, para transformar la composición del producto, el empleo y el patrón de inserción internacional. Este cambio estructural progresivo que permita la transición hacia actividades y sectores con un mayor dinamismo productivo, que favorecen la protección del medioambiente y son más intensivos en conocimientos tecnológicos.

En este enfoque de cambio dos son las fuerzas interrelacionadas:

I. La innovación y la capacidad de transformarla en oportunidades económicas

i) Cambios tecnológicos y valor agregado en otras actividades que se complementan, provocados precisamente por esta innovación.

En este enfoque proponemos como una actividad económica muy importante para las y los jóvenes la economía creativa, que son aquellas actividades que además de generar un valor de cambio y de uso, crean también un valor cultural o expresivo, que se basan en la creatividad, la habilidad y el talento individual y que pueden generar la creación de empleos y riquezas por medio del uso de la propiedad intelectual. Y son precisamente por estas características que enfrenta menos riesgos de automatización, lo que resulta en un crecimiento estable de las oportunidades de empleo (BID, 2018a).

Aunado a lo anterior, experiencias de políticas sociales de otros gobiernos sugieren que la promoción de expresiones artísticas y culturales, es decir la economía creativa, puede contribuir a la integración y generar oportunidades de trabajo para sectores vulnerables.

Entre nuestras propuestas para la juventud se encuentran la de impulsar el desarrollo de la economía creativa y desarrollo de aplicaciones de software desde la preparatoria como opción para cambios profundos en la estructura productiva de Sonora y mayores ingresos. Nunca más atraeremos inversión con ventajas espurias como la mano de obra barata. Promoveremos una política industrial para tal efecto mediante la ecuación, Estado, sector privado, universidad y sociedad.

Las políticas públicas deben atender las problemáticas de la juventud, debido a que la cobertura en Sonora en educación superior es del 42% con una tasa de desocupación en rangos del 9.8%. Son los jóvenes los que más padecen el desempleo, el subempleo y los bajos salarios. De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), las personas jóvenes actualmente son las principales afectadas por la crisis económica provocada por la pandemia del coronavirus, en donde 1 de cada 6 se encuentra sin empleo.

Por otra parte, si analizamos con perspectiva de género la educación superior observamos las diferencias en cuánto a lo que estudian las y los jóvenes. La matricula de educación está compuesta por un 74.4% de mujeres y la de Tecnología de Información y comunicación un 75.3% por hombres, es decir las mujeres con una mayor tasa de educación que los hombres, eligen en un mayor porcentaje licenciaturas del área social y los hombres en ingenieras. Para ello se requieren cambios culturales con el fin de que en el futuro contar con un profesiones mejor balanceadas.

Consideramos que con la finalidad de impulsar el desarrollo económico y social en Sonora, se requiere requiere de cambios profundos en su estructura productiva, y que en esta transformación la juventud juega un papel muy importante, para transformar la composición del producto, el empleo y el patrón de inserción internacional. Este cambio estructural progresivo que permita la transición hacia actividades y sectores con un mayor dinamismo productivo, que favorecen la protección del medioambiente y son más intensivos en conocimientos tecnológicos.

En este enfoque de cambio dos son las fuerzas interrelacionadas:

I. La innovación y la capacidad de transformarla en oportunidades económicas

i) Cambios tecnológicos y valor agregado en otras actividades que se complementan, provocados precisamente por esta innovación.

En este enfoque proponemos como una actividad económica muy importante para las y los jóvenes la economía creativa, que son aquellas actividades que además de generar un valor de cambio y de uso, crean también un valor cultural o expresivo, que se basan en la creatividad, la habilidad y el talento individual y que pueden generar la creación de empleos y riquezas por medio del uso de la propiedad intelectual. Y son precisamente por estas características que enfrenta menos riesgos de automatización, lo que resulta en un crecimiento estable de las oportunidades de empleo (BID, 2018a).

Aunado a lo anterior, experiencias de políticas sociales de otros gobiernos sugieren que la promoción de expresiones artísticas y culturales, es decir la economía creativa, puede contribuir a la integración y generar oportunidades de trabajo para sectores vulnerables.

Entre nuestras propuestas para la juventud se encuentran la de impulsar el desarrollo de la economía creativa y desarrollo de aplicaciones de software desde la preparatoria como opción para cambios profundos en la estructura productiva de Sonora y mayores ingresos. Nunca más atraeremos inversión con ventajas espurias como la mano de obra barata. Promoveremos una política industrial para tal efecto mediante la ecuación, Estado, sector privado, universidad y sociedad.