/ sábado 7 de noviembre de 2020

¿Nos chupamos el dedo?

“No me alejo del PRI, me acerco a la construcción de un proyecto ciudadano donde cabemos todos, me acerco a la integración de un sólido proyecto de gobierno que le dé sentido al crecimiento de Sonora. Ésta es la oportunidad de consolidar una gran propuesta con los liderazgos civiles y con los militantes de otros partidos que privilegien el mejor proyecto que podemos formar juntos: Sonora”: Ernesto Gándara.

Si algo ha imperado en México siempre ha sido la poca participación ciudadana que permiten los entes políticos a los ciudadanos para ser votados, a formar parte de un proyecto integral, un proyecto ciudadano en el que caben todos, el beneficio de la duda merece.

“Borreguín” y el tricolor hacen una jugada arriesgada, de materializarse la alianza entre líderes políticos y “ciudadanos”, el famoso “PRIAN” que tanto mencionó el actual presidente de la República, no desaparecerá, al contrario habrá cambiado de nombre para intentar hacerle creer al electorado que las cosas cambiaron.

Darle el toque de “proyecto ciudadano” intenta dotar al movimiento de ser algo del pueblo para el pueblo, aunque los personajes políticos y familias políticas que controlan el poder político del estado no se quedan fuera, al contrario forman parte de esa alianza entre líderes políticos y ciudadanía, en pocas palabras sigue siendo lo mismo, solo que con nombre diferente.

Detrás de Gándara están los mismos que durante años han gobernado al estado, quienes aseguran que se posee una grandeza que nunca han permitido llegue a materializarse, pues por alguna extraña razón y a pesar de las riquezas que existen en éste, no crece ni se desarrolla como se debe.

Para nadie es un secreto que el exlíder del partido, Manlio Fabio Beltrones, tiene un poder inmenso en el estado, se pudiera decir que es su dueño no oficial o nada pasa en la entidad sin que su eminencia Beltrones se entere antes, no hay que olvidar que todos daban como candidato al “Borrego” en las elecciones pasadas, pero la decisión del líder fue elegir a la actual y saliente gobernadora de Sonora.

Por cierto, imagino que don Ernesto Munro ya ha de estar hablando con su tocayo borrego sobre cómo es que irán en alianza, porque hay que recordar que uno de los requisitos para ir en alianza con el tocayo era que éste renunciara al partido tricolor, cosa que ya hizo.

Así que el PRIAN se convierte en un proyecto ciudadano donde supuestamente cabemos todos, aunque en realidad son las figuras políticas de siempre con las familias de siempre quienes heredan el poder a sus hijos, primos, hermanos, novios, esposas, amantes, mascotas, lamebotas y demás.

Si “Don Borre” llega a la gubernatura, tal vez pueda explicarle a los sonorenses por qué pensó que apoyar el aumento del IVA de 8 a 16% en la frontera fue una genial idea y qué decir de las acusaciones de algunos ejidatarios en Sonora contra el tío de la “gober preciosa” que presuntamente se adueñó de sus tierras y semanario “Proceso” le realizó un reportaje sobre ello.


“No me alejo del PRI, me acerco a la construcción de un proyecto ciudadano donde cabemos todos, me acerco a la integración de un sólido proyecto de gobierno que le dé sentido al crecimiento de Sonora. Ésta es la oportunidad de consolidar una gran propuesta con los liderazgos civiles y con los militantes de otros partidos que privilegien el mejor proyecto que podemos formar juntos: Sonora”: Ernesto Gándara.

Si algo ha imperado en México siempre ha sido la poca participación ciudadana que permiten los entes políticos a los ciudadanos para ser votados, a formar parte de un proyecto integral, un proyecto ciudadano en el que caben todos, el beneficio de la duda merece.

“Borreguín” y el tricolor hacen una jugada arriesgada, de materializarse la alianza entre líderes políticos y “ciudadanos”, el famoso “PRIAN” que tanto mencionó el actual presidente de la República, no desaparecerá, al contrario habrá cambiado de nombre para intentar hacerle creer al electorado que las cosas cambiaron.

Darle el toque de “proyecto ciudadano” intenta dotar al movimiento de ser algo del pueblo para el pueblo, aunque los personajes políticos y familias políticas que controlan el poder político del estado no se quedan fuera, al contrario forman parte de esa alianza entre líderes políticos y ciudadanía, en pocas palabras sigue siendo lo mismo, solo que con nombre diferente.

Detrás de Gándara están los mismos que durante años han gobernado al estado, quienes aseguran que se posee una grandeza que nunca han permitido llegue a materializarse, pues por alguna extraña razón y a pesar de las riquezas que existen en éste, no crece ni se desarrolla como se debe.

Para nadie es un secreto que el exlíder del partido, Manlio Fabio Beltrones, tiene un poder inmenso en el estado, se pudiera decir que es su dueño no oficial o nada pasa en la entidad sin que su eminencia Beltrones se entere antes, no hay que olvidar que todos daban como candidato al “Borrego” en las elecciones pasadas, pero la decisión del líder fue elegir a la actual y saliente gobernadora de Sonora.

Por cierto, imagino que don Ernesto Munro ya ha de estar hablando con su tocayo borrego sobre cómo es que irán en alianza, porque hay que recordar que uno de los requisitos para ir en alianza con el tocayo era que éste renunciara al partido tricolor, cosa que ya hizo.

Así que el PRIAN se convierte en un proyecto ciudadano donde supuestamente cabemos todos, aunque en realidad son las figuras políticas de siempre con las familias de siempre quienes heredan el poder a sus hijos, primos, hermanos, novios, esposas, amantes, mascotas, lamebotas y demás.

Si “Don Borre” llega a la gubernatura, tal vez pueda explicarle a los sonorenses por qué pensó que apoyar el aumento del IVA de 8 a 16% en la frontera fue una genial idea y qué decir de las acusaciones de algunos ejidatarios en Sonora contra el tío de la “gober preciosa” que presuntamente se adueñó de sus tierras y semanario “Proceso” le realizó un reportaje sobre ello.