/ martes 5 de noviembre de 2019

Una Perspectiva Salubrista

Determinantes sociales de la salud

De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la salud se encuentra determinada por cuatro grandes elementos.


Vistos éstos, de menor a mayor, serían: 1. El sistema sanitario, que representa 11% en lo que a mantenimiento de la salud se refiere y pretende garantizar el acceso a la salud. En México está representado, principalmente, por el sector público y el sector privado; 2. El medio ambiente, el cual interviene en 19% en el equilibrio de la salud y es en este rubro donde se incluyen los servicios de saneamiento básico como el agua potable y drenaje, pero no son los únicos, pues está la seguridad pública o la calidad del aire que entrarían en este grupo; 3. La biología humana sería el tercer elemento en cuya esfera recae 27% de la salud. Aunque son muchas las áreas que pertenecen a este grupo, fisiología, anatomía y metabolismo, bien pudiera decirse que la edad, el sexo y la genética van determinando, en conjunto con los otros elementos, las posibles enfermedades a las que la persona es más susceptible y 4. Los estilos de vida, que vienen a representar el 43% en la salud, esto es cerca de la mitad de lo que se requiere para tener un buen estado de salud y no padecer cualquiera de las múltiples condiciones de enfermedad conocida, física o mental, viene a ser el principal factor el estilo de vida, siendo los hábitos y prácticas que la persona diariamente realiza en su vida cotidiana.

Cuando se analizan en conjunto estos cuatro elementos que son el estilo de vida, la biología que representa el funcionamiento del cuerpo, el medio ambiente y el sistema nacional de salud, se deduce fácilmente que en 73% de lo que determina la salud, la persona, en unión con el sistema de gobierno, es responsable quien tiene el control de su salud.

En los tiempos modernos se ha llegado a un egocentrismo en el que los intereses personales privan sobre la colectividad y como si esto no fuera suficientemente grave, se ha desatendido la función pública para que en la teoría y la práctica se vean reflejadas las necesidades y soluciones propuestas como una realidad.

Los determinantes sociales de la salud son las condiciones donde nace la persona, donde crece, se desarrolla, vive y trabaja, es decir persona y todo su entorno. Es en este punto donde confluyen sociedad, gobierno, persona, cultura, educación y valores. Es aquí donde la educación, el empleo, los servicios básicos de la salud y la vivienda, entre otros muchos factores, son los elementos que determinan la salud. Es aquí donde todos debemos hacer la parte que nos corresponde, como un simple lavado de manos, desinfectar frutas y verduras, aplicarse las vacunas de acuerdo al grupo de edad y sexo, deshacerse de la basura de manera correcta, mantener limpia la vivienda, cuidar de los animales de compañía apropiadamente, respetar los límites de velocidad y todos los señalamientos de vialidad, etcétera, pero, además, interesarse, pedir y verificar, ante los representantes populares y funcionarios públicos que las políticas públicas consideren prioridad estos determinantes sociales de la salud, que sean bien aplicados y que rindan buenos resultados.

En la lluvia de información a la que se está expuesto diariamente se debe poner especial atención que los programas de promoción y prevención sean prioritarios y se supervise que se cumplan tanto por ciudadanos como las autoridades, finalmente estas políticas públicas deben tener objetivos bien claros y definidos, así como la manera de hacer que se cumplan.

Determinantes sociales de la salud

De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la salud se encuentra determinada por cuatro grandes elementos.


Vistos éstos, de menor a mayor, serían: 1. El sistema sanitario, que representa 11% en lo que a mantenimiento de la salud se refiere y pretende garantizar el acceso a la salud. En México está representado, principalmente, por el sector público y el sector privado; 2. El medio ambiente, el cual interviene en 19% en el equilibrio de la salud y es en este rubro donde se incluyen los servicios de saneamiento básico como el agua potable y drenaje, pero no son los únicos, pues está la seguridad pública o la calidad del aire que entrarían en este grupo; 3. La biología humana sería el tercer elemento en cuya esfera recae 27% de la salud. Aunque son muchas las áreas que pertenecen a este grupo, fisiología, anatomía y metabolismo, bien pudiera decirse que la edad, el sexo y la genética van determinando, en conjunto con los otros elementos, las posibles enfermedades a las que la persona es más susceptible y 4. Los estilos de vida, que vienen a representar el 43% en la salud, esto es cerca de la mitad de lo que se requiere para tener un buen estado de salud y no padecer cualquiera de las múltiples condiciones de enfermedad conocida, física o mental, viene a ser el principal factor el estilo de vida, siendo los hábitos y prácticas que la persona diariamente realiza en su vida cotidiana.

Cuando se analizan en conjunto estos cuatro elementos que son el estilo de vida, la biología que representa el funcionamiento del cuerpo, el medio ambiente y el sistema nacional de salud, se deduce fácilmente que en 73% de lo que determina la salud, la persona, en unión con el sistema de gobierno, es responsable quien tiene el control de su salud.

En los tiempos modernos se ha llegado a un egocentrismo en el que los intereses personales privan sobre la colectividad y como si esto no fuera suficientemente grave, se ha desatendido la función pública para que en la teoría y la práctica se vean reflejadas las necesidades y soluciones propuestas como una realidad.

Los determinantes sociales de la salud son las condiciones donde nace la persona, donde crece, se desarrolla, vive y trabaja, es decir persona y todo su entorno. Es en este punto donde confluyen sociedad, gobierno, persona, cultura, educación y valores. Es aquí donde la educación, el empleo, los servicios básicos de la salud y la vivienda, entre otros muchos factores, son los elementos que determinan la salud. Es aquí donde todos debemos hacer la parte que nos corresponde, como un simple lavado de manos, desinfectar frutas y verduras, aplicarse las vacunas de acuerdo al grupo de edad y sexo, deshacerse de la basura de manera correcta, mantener limpia la vivienda, cuidar de los animales de compañía apropiadamente, respetar los límites de velocidad y todos los señalamientos de vialidad, etcétera, pero, además, interesarse, pedir y verificar, ante los representantes populares y funcionarios públicos que las políticas públicas consideren prioridad estos determinantes sociales de la salud, que sean bien aplicados y que rindan buenos resultados.

En la lluvia de información a la que se está expuesto diariamente se debe poner especial atención que los programas de promoción y prevención sean prioritarios y se supervise que se cumplan tanto por ciudadanos como las autoridades, finalmente estas políticas públicas deben tener objetivos bien claros y definidos, así como la manera de hacer que se cumplan.