Roma.- Severos controles y estrecha vigilancia, 2 mil quinientos agentes de policia en las calles, plazas y locales publicos del centro de la Ciudad Eterna, prohibida la venta de bebidas alcoholicas del 1 al 3 de mayo y estrecha colaboracion entre las fuerzas del orden inglesas y romana.
No se trata de medidas adoptadas en vista de una cumbre internacional, sino de un partido de futbol, y de los posibles actos de vandalismo y violencia entre los respectivos fanáticos de la “Roma” y del “Liverpool”, protagonistas el proximo miércoles del encuentro de vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones de Europa.
En el cotejo de ida, se impusieron los “Red” de Liverpool por 5 a 2. Antes del partido se registraron violentos incidentes entre “hooligans” y “tifosi” de la “Roma”, que culminaron con un inglés gravemente herido, actualmente hospitalizado y en coma.
Los dos romanos acusados de haber golpeado con inaudita dureza a Sean Cox, se encuentran encarcelados en Liverpool en espera de ser procesados.
Por lo tanto, la probabilidad de que vuelvan a verificarse también en Roma episodios semejantes es bastante concreta, con los “hooligans” (seran cinco mil los que viajaran a Roma) dispuestos a “vengar” al fanatico del “Liverpool”, también a través de actos vandalicos.
Por otra parte, los “tifosi” del equipo italiano han adherido a la colecta en favor de Sean Cox para ayudarlo a pagar los gastos médicos necesarios, pero también contribuyen economicamente para que los dos “tifosi” en prision puedan pagar a los abogados de su defensa.
Es muy probable también que la UEFA decrete duras sanciones contra el club romanista. A poco han servido las declaraciones de condena de los episodios vandalicos de ”pocos tifosi” por parte de la dirigencia de la “Roma” y de su presidente, el empresarios estadounidense James Pallotta.
Desdepunto de vista estrictamente deportivo, en este clima de fuerte tension, la “Roma” cree, tal vez con demasiado optimismo, en la posibilidad de remontar el resutado del partido de ida. La esperanza es la ultima a morir.
