Continúan las ineficiencias en los servicios de salud como se venían presentando con el llamado Seguro Popular, ahora Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), ya que hay desabasto de algunos medicamentos y aún no se ha instalado la plataforma digital para verificar que los pacientes que solicitan atención en los centros de salud del estado no sean derechohabientes de otras instituciones.
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Al cuestionar a la directora del Centro de Salud Urbano de la Secretaría de Salud de Sonora, Leticia Sánchez, si se ha presentado algún cambio en la manera de atender a los pacientes, dijo que, por el momento, todo sigue igual y que no ha habido modificación con la entrada en vigor del Insabi, a partir del 1 de enero.
A la gente que solicita atención médica se le pide que presente la póliza del “Seguro Popular” y en caso de no tenerla o esté vencida, el usuario debe mostrar la credencial de elector y la Clave Única del Registro de Población (CURP).
Cabe destacar que autoridades de salud a nivel federal habían anunciado que los documentos del “Seguro Popular” se descartarían con la puesta en marcha del Insabi, pero la realidad es otra.
La doctora Sánchez destacó que, con el Insabi, todos los servicios de la Secretaría de Salud de Sonora son gratuitos para quienes no estén afiliados a instituciones como el IMSS, ISSSTE e ISSSTESON, a diferencia del “Seguro Popular” que obligaba a los pacientes a pagar algunos servicios y contar con una póliza vigente para ser atendidos.
Referente al problema del desabasto de medicamentos que se presenta desde hace tiempo, Leticia Sánchez manifestó que generalmente se escasean algunos para tratar enfermedades crónico-degenerativas como la diabetes e hipertensión arterial, situación que esperan mejore con el Insabi.
OPINAN SOBRE SERVICIOS
Por su parte, Esther González externó su delusión por la atención recibida en el “Seguro Popular”, pues asegura que cuando necesitó una cirugía de vesícula tuvo que hacer un pago de 8 mil pesos, además de costear los servicios de análisis clínicos y los medicamentos porque no se tenían en el Hospital General.
“También mi sobrina vino a atenderse en el Centro de Salud porque está embarazada y le cobraron 30 pesos por la Cartilla de Citas y eso que tiene Seguro Popular”, apuntó.
Mientras tanto, Fidelia Lozoya consideró que los servicios en el Centro de Salud Urbano son buenos, ya que nunca ha tenido problemas en la atención y la mayoría de las veces recibe la totalidad de las medicinas recetadas por el médico.
“Mi esposo y yo aprovechamos el Seguro Popular porque no tenemos Seguro Social. Él trabaja por su cuenta”, concluyó.