Dolph Volker es un fotógrafo, voluntario en Sudáfrica en la organización Cheetah Experience, la cual se dedica a proteger y preservar al guepardo y otras especies en peligro de extinción.

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Estos felinos pueden ser animales muy tímidos, a los cuales no les agrada mucho la cercanía de los humanos.

Pero si hay alguien trabajando fuertemente para que los guepardos confíen en él es Dolph, y todo parece indicar que su esfuerzo rindió frutos.

Pues un día, después de pasar mucho tiempo bajo los rayos del sol, le pareció buena idea recostarse y tomar una siesta bajo la sombra de un árbol y fue ahí cuando sucedió.

Eden, una guepardo vio al fotógrafo recostado y decidió acercarse a él.

¡Olfateó al humano, antes de acurrucarse junto a él!

Dolph no podía creerlo, estaba muy confundido y sobre todo sorprendido al despertarse y encontrar a Eden recostada a su lado.

En ese momento, oficialmente había comenzado su amistad.

Se comenta que para la guepardo, Volker y ella son de la misma especie, que lo abraza y juega con él, además de ronronearle y recostarse con él.

Incluso el fotógrafo se ha ganado el apodo de El encantador de guepardos, pues pasa la mayoría de su tiempo en compañía de estos felinos.