Ganador de tres premios Oscar y seis Globos de oro por la espléndida manufactura de sus películas, el sueco Ingmar Bergman ocupa un lugar preponderante en la historia del Séptimo Arte; su obra lo coloca entre los iconos de la cinematografía mundial de la segunda mitad del siglo XX. El realizador de Fanny y Alexander, merecedor del premio “Irving Thalberg” por toda una trayectoria, nació hace 100 años, que hoy se cumplen.
Amante del teatro literalmente desde que vio la primera luz en Upsala, unaciudad situada al noroeste de Estocolmo, la capital sueca, el cineasta se inició comoguionista y durante más de 50 años desarrolló una carrera clave y un estilo muy personal, inmerso en la metafísica y la exploración del ser humano. En su arte había creatividad, estética y movimiento, pero también un profundo sentido de todo aquello que deseaba transmitir.
Las vivencias de su infancia y adolescencia, signadas por una educación basada en ideas luteranas sobre la muerte, el pecado, el dolor, el castigo, la confesión, el amor, el perdón y la misericordia, generaron en Ingmar Bergman una serie de temores e imágenes violentas que encontraron en su cine un modo de desfogue. Bergman exorcizó así sus demonios, al tiempo que aportó a la Humanidad medio centenar de filmes capaces de incitar a la reflexión.
Fue el segundo hijo del pastor luterano Erik Bergman y de Karin Akerblom, quienes le inculcaron valores que no concordaban con sus sentimientos ni consus creencias. Cursó el bachillerato en una escuela privada y emprendió entonces la búsqueda de su propia identidad, encontrando en el teatro y el cine sus medios de expresión y los campos propicios para desarrollar su arte.
Ingenioso y creativo, vivaz y soñador, Ernst Ingmar Bergman incursionó como ayudante de dirección en el Teatro de la Ópera Real de Estocolmo, aunque escribió su primer guión cinematográfico en 1944, Tortura, cinta que fue dirigida por Alf Sjöber en la cual Ingmar de hecho debutó como director al rodar algunas escenas finales. Un año después, Crisis representaría su primer filme.
La trayectoria del realizador sueco estaba en marcha. Sus historias quedaban plasmadas en una docena de filmes que seguirían a continuación, acaparando la atención de crítica y público y el reconocimiento unánime a su trabajo, sobre todo en países de Europa y América del Sur. El reconocimiento en Hollywood llegaría más tarde con la película Sonrisas de una noche de verano (1955), en la que aborda la relación de un padre con su hija y que es, desde luego, un reflejo de su vida.
El séptimo sello y Fresas salvajes son otras de sus películas emblemáticas. La crítica considera a la primera de ellas su primera obra maestra. Ganó el Premio del Jurado en el Festival de Cannes (1957), mientras la segunda, entre otros, se alzó con el Globo de oro de la prensa extranjera en Hollywood y el Oso de oro en el Festival de Berlín.
LA MEJOR ETAPA
Sin embargo, el ascenso se mantenía en aumento. A la deslumbrante trayectoria del cineasta se añadiría una nueva carga de obras maestras en una etapa que los críticos consideran la mejor. Títulos como En el umbral de la vida, El rostro, El manantial de la doncella y El ojo del diablo, muestran a un Bergman maduro instalado en la cima, abordando diversos géneros como la fábula, la comedia y el terror.
Como en un espejo, El silencio y Persona dieron continuidad a su filmografía, entreinnumerables premios y… mujeres. Aun cuando Persona no alcanzó la taquilla deseada, se la considera la obra cumbre del maestro, quien, ser humano al fin, conquistó un nuevo amor durante el rodaje: Liv Ullmann, la actriz noruega que vendría a engrosar la lista de amores del fogoso cineasta: cinco esposas, tres parejas y nueve hijos.
La lista de sus películas es larga. Basta recordar que Pasión fue su primer trabajo en color, en 1969. Se trata de una más de sus obras maestras, que marca el fin de una etapa de gran creatividad y experimentación que consolidan su cine de arte.
ÉXITO Y FRACASO
Pero no todo fueron alabanzas para su trabajo. Su debut en el mercado hollywoodense con la cinta en inglés La carcoma (1971) resultó un desastre. La crítica fue implacable, situación que se superó con el próximo estreno de Gritos y susurros, una de las más aplaudidas del director.
Fanny y Alexander fue su último filme, en 1982, después de aportar otros títulos brillantes como De la vida de las marionetas, Cara a cara, Sonata de otoño y El huevo de la serpiente, en el marco de una carrera cinematográfica que se acercaba a su final, siempre en medio de galardones y reconocimientos, una etapa en Alemania y su regreso al teatro y a la televisión, aquí, el medio electrónico para el que también dirigió filmes.
Ingmar Bergman nació el 14 de julio de 1918 y falleció el 30 de julio de 2007 por causas naturales. La muerte lo sorprendió en su mansión de la isla de Faarö.
SUS FILMES MÁS EMBLEMÁTICOS
1945. Crisis
1948. Música en la noche
1951. Juegos de verano
1953. Un verano con Mónica
1955. Sonrisas de una noche de verano
1956. El séptimo sello
1957. Fresas salvajes
1959. El manantial de la doncella
1961. Como en un espejo
1963. El silencio
1966. Persona
1972. Gritos y susurros
1977. El huevo de la serpiente
1978. Sonata de otoño
1982. Fanny y Alexander
SUS PREMIOS
Conquistó tres Oscar a mejor película en habla no inglesa:
* 1961. El manantial de la doncella
* 1962. Como en un espejo
* 1984. Fanny y Alexander
* Premio Irving Thalberg a toda una trayectoria
Ganó seis Globos de oro a mejor película en habla no inglesa
* 1960. Fresas salvajes
* 1961. El manantial de la doncella
* 1975. Secretos de un matrimonio
* 1977. Cara a cara
* 1979. Sonata de otoño
* 1984. Fanny y Alexander
EN CANNES
* 1957. Premio Especial del Jurado por El séptimo sello
* 1997. Palma de palmas
* 1998. Premio especial por el conjunto de su obra
También fue distinguido con el Oso de oro del Festival de Berlín y el León de oro de la “Mostra” veneciana, así como el César del cine francés, entre otros muchos galardones.
SUS ACTORES FAVORITOS
El icónico realizador agrupó en torno a sus obras a un grupo de espléndidos actores, suecos por supuesto:
Gunnar Björnstrand, Ingrid Thulin, Max Von Sydow, Bibi Andersson, Harriet Andersson, Liv Ullmann (de origen noruego) y Erland Josephson, entre otros.
SUS AMORES
Else Fisher (casado de 1943 a 1945)
Ellen Lundström (casado de 1945 a 1950)
Gun Grut (casado de 1951 a 1959)
Kabi Laretei (casado de 1959 a 1969)
Ingrid von Rosen (casado de 1971 a 1995)
Harriet Andersson (su pareja de 1952 a 1955)
Bibi Andersson (su pareja de 1955 a 1959)
Liv Ullmann (su pareja de 1965 a 1970)