El problema de consumo de drogas está iniciando en los adolescentes sanluisinos, en promedio, a los 15 años. Principalmente de cristal y fentanilo, por lo que es necesario que los padres de familia hablen del tema y orienten a sus hijos sobre los efectos nocivos que producen estas sustancias.
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Arturo Tejeda, psicopedagogo con especialidad en tratamiento de adicciones, indicó que la mayoría de los pacientes que atiende en terapias están en un rango de edad de los 16 a los 25 años y resaltó que el fácil acceso y lo barato de algunas drogas como el cristal son las causas por las cuales va en aumento el número de consumidores.
En relación con el fentanilo, Arturo Tejeda señaló que también es una sustancia “popular” entre los adolescentes y jóvenes. Sin embargo, por su precio elevado no es de fácil acceso para todos.
Mediante las terapias de rehabilitación que brinda Arturo Tejeda ha detectado que además del cristal y el fentanilo, en esta ciudad se está consumiendo heroína y cocaína, así como marihuana que es la droga de inicio al igual que otras que, aunque son legales no dejan de ser drogas, refiriéndose al tabaco y el alcohol.
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Resaltó que la desinformación que tienen los jóvenes sobre el tema de las drogas los orilla, en ocasiones, al consumo ya que existen padres y madres de familia que ven el tema como tabú y no lo abordan en casa, con sus hijos.
Es importante, consideró el especialista en tratamiento de adicciones, que se exponga ante los niños, adolescentes y jóvenes, los daños que ocasiona el consumo de dichas sustancias porque de lo contrario recibirán información incorrecta por parte de amistades que les dirán que el uso de drogas les generará diversión extrema, pero la realidad no es así.
Arturo Tejeda hizo hincapié en que, aunado a la desinformación, otro aspecto que influye en que los menores de edad consuman drogas es la falta de campañas publicitarias en medios de comunicación masivos que expongan que hay maneras de divertirse sin usar sustancias nocivas. Además, apuntó que algunos padres son muy permisivos con sus hijos y los dejan tomar alcohol o fumar durante su etapa de adolescencia y eso hace que los menores vean “normal” estas conductas.
Sugirió a los padres de familia que hablen con sus hijos y les informen sobre los efectos nocivos que provocan las drogas y, de esta manera, ellos aprendan a decir no cuando se presente la oportunidad y, sobre todo, para prevenir adicciones recomendó que soliciten el apoyo de profesionales en la materia.
Para más información al respecto, Arturo Tejeda proporcionó su número de teléfono 653-5357623.
