Aunque en su mayoría los cubanos que por diferentes motivos salen de su país natal, optan por llegar a Estados Unidos, su experiencia es diferente, por amor, él decidió solicitar su estadía legal en México, donde vive con su esposa y donde está en búsqueda de trabajo.
RECIBE LAS NOTICIAS DE TRIBUNA DIRECTO EN TU WHATSAPP, SUSCRÍBETE AQUÍ
Es la particular historia de Antonio Robaina Estival, un joven egresado del Instituto Superior Politécnico “José Antonio Echeverría”, como Ingeniero eléctrico, que como pocos, no salió de su natal Cuba huyendo de conflictos político-sociales, lo hizo por la puerta de enfrente, con el único deseo de vivir al lado de la que, desde hace un par de años es su esposa, una mujer originaria de Tecate, Baja California, pero radicada en este municipio.
El ingeniero contó que conoció a la mujer que hoy es el amor de su vida, mientras ella vacacionaba en Cuba, allá él la invitó a bailar un paso de salsa, fue así como nació su historia en común, al año, el ya había solicitado de México un permiso para vivir; hoy, con documentos que amparan su permiso para hacer vida y trabajar en territorio mexicano, busca empelarse en algo alusivo a su formación profesional.
“He dejado mis documentos en varias empresas, pero sigo a la espera de ser llamado por alguna de ellas, porque no he optado por migrar a Estados Unidos, como lo hace la mayoría de mis compatriotas, a mí me gusta San Luis Río Colorado y su gente, entonces aquí me quiero quedar”, compartió.
Por Antonio Robaina Estival se puede preguntar en las oficinas de la Asociación Mexicana de Mujeres Empresarias (Amexme), ubicadas en la avenida Zaragoza entre Cuarta y Quinta.
