Durante los dos primeros meses de la contingencia sanitaria, en la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 38 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) tuvo una disminución del 50% en las consultas con el médico familiar, pero la semana pasada empezó a normalizarse la demanda de este servicio.
RECIBE NOTICIAS DIARIAS EN TU CELULAR, ÚNETE A NUESTRO CANAL DE TELEGRAM AQUÍ
El director de la unidad médica, Óscar Castro Guevara, consideró que la reducción en el número de consultas médicas se debió a que los derechohabientes decidieron no acudir a la clínica al tener molestias mínimas de salud, precisamente, para evitar riesgos de contagio de Covid-19.
Otro factor que influyó en la reducción de pacientes desde mediados de marzo a mediados de mayo, fue el programa “Receta resurtible” el cual, aunque ya estaba en marcha, se reforzó en esta crisis sanitaria permitiendo que las personas con enfermedades crónico-degenerativas, reciban las recetas de sus medicamentos por varios meses y, así, no tengan que ir a consulta cada 30 días.
Óscar Castro dijo que por lo general, un médico familiar atiende a 24 pacientes en una jornada de 6 horas, cantidad que se redujo a 10 o 15 en días pasados. Sin embargo, desde la semana pasada y en lo que va de la actual, la demanda del servicio se normalizó a 22 consultas.
En la UMF número 38, conocida como “Seguro nuevo”, los profesionales de la salud asignados a medicina familiar atienden a diario a 576 pacientes, en 12 consultorios distribuidos en los turnos matutino y vespertino.
En esta clínica los servicios que están suspendidos parcialmente son la consulta dental, trabajo social y nutrición.