Durante la pandemia decenas de sanluisinos perdieron sus empleos ocasionando que tuvieran que buscar una manera innovadora de continuar generando ingresos para sostener sus hogares, lo que les dio la oportunidad de crecer al sector del comercio informal utilizando plataformas como las redes sociales para darse a conocer.
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Leinad Rodríguez, es una joven de 24 años que acude con su mamá a vender productos en el tianguis del parque Yoreme: “Ahora que yo vivo sola y me quedé sin trabajo, decidí poner a la venta algunas de mis pertenencias usadas que se encontraban en buen estado y otras que solo tenían pequeños detalles de uso, cada domingo durante los últimos 3 meses”.
“Yo tuve que cerrar mi negocio, durante la pandemia ya no me alcanzaba para cubrir los gastos de renta y comencé a vender mis productos por Facebook, anunciando en páginas de clasificados para dar a conocer mi tienda de manera virtual” es lo que comparte Alejandra Blanco, una sanluisina que convirtió su emprendimiento de presencial a virtual.
Plataformas como las redes sociales impulsan la compra y venta de artículos usados y nuevos, mediante su función de “Marketplace” que en la mayoría de las ocasiones ofrecen artículos a un mejor precio que en las opciones de la competencia, debido a que no tienen que cubrir gastos de algun local o los servicios que necesitan.
El comercio informal se caracteriza por no estar registrado para el pago de impuesto sobre la venta, sin embargo, hay ocasiones en las cuales las ventas de un día triplican el salario mínimo correspondiente, por lo cual este tipo de ventas se ha llegado a posicionar como uno de los más usados por los sanluisinos al poder llegar a más personas.
