Si bien el chano y la sierra son pesquerías hasta cierto punto “menores” con respecto a la curvina y el camarón, sí se consideran muy importantes, en los primeros días se ha visto una mejora en el precio, y la producción de esas especies han sido muy altas, mejores de las esperadas, lo que ayuda a la economía de los pescadores.
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El cooperativista Carlos Tirado Pineda, informó que hace poco tiempo, comenzó la pesca del chano, que es muy apreciada en los países del medio oriente como China, y se han tenido buenos volúmenes.
“El año pasado estuvo muy bajo el precio del chano, como a 6 pesos, ahora ya se encuentra a 11 o 12 pesos, por lo que se ha visto una mejora sustancial”.
Agregó que esta pesquería les ha ayudado mucho en su economía, si es que se mantiene o se incrementa el precio en los siguientes días aún más.
Comentó que la prueba de la alta demanda, es el precio en que se valúa actualmente y eso lo aprecian los pescadores, cuando el año pasado se vieron apurados con los malos resultados de la temporada de esas especies.
En cuanto a la sierra, ha sido bastante la producción que ha dado esta pesquería, debido a que embarcaciones del poblado han conseguido entre una y dos toneladas, lo que para ellos fue una agradable sorpresa.
“La sierra tiene mucha demanda en el sur del país, aunque también la consumen aquí mismo, ésta es una de especies que mayor derrama deja al poblado”.
Indicó que pobladores del Golfo, han dicho que desde hace 15 o 20 años no veían una producción tan vasta de sierra como la de este año, por lo que quieren aprovechar para mejorar la economía del lugar.
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Comentó que, de alguna manera, las cifras que representa estas pesquerías para el poblado superan por mucho a lo conseguido por la curvina, la cual se vio afectada por el tamaño de la misma, así como el precio.
La curvina
Por otra parte, la decepción de este año fue la curvina, cuando se suponía que sería la pesquería que sería “punta de lanza” de la economía del Golfo de Santa Clara.
“Uno de los problemas fue el tamaño del pescado, no fue lo suficientemente grande para ser atractivo para el mercado, además de que no hubo suficiente producción de la misma, lo que provocó decepción en todos”.
Si bien hubo un promedio de 700 kilos en captura de la curvina, no fue lo esperado, ya que por lo menos querían el doble de producción, además que el precio no les favoreció.
Eran rara la embarcación que lograba una tonelada o más del producto, por lo que los ribereños se decepcionaron de la temporada de una de las pesquerías más esperadas.