Este 4 de abril se cumplen 12 años del sismo que tuvo una magnitud de 7.2 grados en la escala de richter, el cual afectó San Luis Río Colorado, Sonora y Mexicali, Baja California, entre otras ciudades de la región.
En 2010 sucedió un fenómeno natural que, hasta la fecha, los sanluisinos recuerdan como una de los acontecimientos más trágicos que han presenciado, por el impacto emocional y los daños materiales que ocasionó.
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Fue alrededor de las 15:40 horas cuando el temblor sorprendió a la sociedad que en ese momento se encontraba disfrutando de un día de descanso, ya que el 4 de abril de 2010 fue domingo de Semana Santa.
El gran movimiento telúrico y sus réplicas provocaron grietas, hundimientos y desplazamientos del suelo, así como la suspensión de los servicios de electricidad y agua potable, dejando incomunicada a la población pues se cortaron las señales de telefonía móvil, internet y radio, tanto en la zona urbana como rural.
Tal situación propició que algunos sanluisinos entraran en pánico por la incertidumbre y el miedo de no saber qué pasaría y, sobre todo, por pensar qué en cualquier momento podría temblar de nuevo.
BOMBERO RECUERDA ESA FECHA
El capitán del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de San Luis, Ramón González Pérez, quien formó parte activa de las labores de rescate de ese día, recordó que en el momento del sismo se encontraba trabajando en el operativo de seguridad de Semana Santa en las playas del poblado Golfo de Santa Clara.
“Cuando se registró el temblor, tratamos de comunicarnos a la base de la ciudad, pero no había señal. Tuvimos que subirnos a una loma y de ahí pudimos hablar por radio con nuestros compañeros. Ellos estaban muy preocupados por nosotros, los que andábamos en el Golfo, porque llegaron rumores de que el agua del mar había llegado a las casas, pero los tranquilizamos. Les dijimos que no había sido así, que estábamos bien”.
Ramón González dijo que fueron circunstancias difíciles para las corporaciones de rescate, ya que tuvieron que trabajar sin descanso durante varios días para realizar labores propias de este tipo de acontecimientos naturales.
Aunado al temblor, los integrantes de los Bomberos Voluntarios, al igual que otras corporaciones, tuvieron que atender el incendio de una reconocida tienda departamental que se ubicaba en la avenida Madero y calle Tercera, el cual fue ocasionado por un corto circuito que surgió en el tercer piso del edificio.
“Fueron 2 días completos, sin parar, los que invertimos en ese incendio que se generó por un corto circuito después del temblor. Era un edificio muy viejo que fue consumido en su totalidad por las llamas”, refirió el capitán González Pérez.
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CÓMO ACTUAR
Tomando en cuenta que San Luis Río Colorado se encuentra en una zona altamente sísmica, la población debe estar preparada para actuar antes, durante y después de este tipo de siniestros.
Antes, reubicar objetivos para que no le caigan encima a una persona de ocurrir un sismo; establecer rutas de evacuación; tener a la mano un botiquín, linterna, radio de pilas y comida enlatada y contar con una copia de documentos oficiales importantes.
Durante, mantener la calma; no correr; acudir a zonas de seguridad ya establecidas; mantenerse alejado de ventanas, vidrios, espejos, puertas exteriores o paredes; alejarse de los postes y cables eléctricos; alejarse de repisas que contengan objetos que puedan caer y no usar elevadores.
Después del sismo, la recomendación es esperar al menos de 10 a 20 minutos antes de ingresar al hogar o lugar de trabajo; inspeccionar el hogar para ver si hay daños y apagar el sistema eléctrico y de gas; si la luz se corta, use linternas de batería y no utilice velas ni fósforos y no fume en el interior.
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