Aunque los sacerdotes y religiosas de San Luis Río Colorado cuentan con servicios de salud, han procurado cuidarse en este tiempo de contingencia sanitaria para evitar infectarse de Covid-19, pero a pesar de eso han fallecido cinco párrocos que pertenecían a la Diócesis de Mexicali.
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De acuerdo con el padre Germán Orozco Mora, párroco del templo Nuestra Señora de Fátima, los sacerdotes que han perdido la batalla contra el virus son: Francisco Javier Magallanes Cortés, Nicolás “Nico” Alvarado, José María “Chema” González, Moisés Olmos Ponce y Juan Manuel Molina.
Cabe destacar que al retomar las actividades dentro de los templos en la “nueva normalidad”, luego de suspenderse por algunos meses, se han implementado medidas sanitarias como el uso de cubrebocas, sana distancia y solamente se permite un aforo de 25% de fieles.
RECIBEN SERVICIOS MÉDICOS
El padre Agustín Partida Díaz Garza, encargado de la capilla Santo Niño de Atocha, refirió que la Diócesis de Mexicali paga un seguro de gastos médicos a los sacerdotes, atendidos en clínicas y hospitales privados gracias a las contribuciones económicas de la población católica.
Dijo que el beneficio del seguro de salud particular lo reciben hace 4 años, ya que anteriormente ellos hacían una aportación económica que se destinaba a un fondo del que hacían uso cada vez que requerían atención médica.
En la actualidad la situación financiera para la iglesia es complicada debido a que es mínima la cantidad de personas que se permite ingresar a los templos, lo cual ha generado una reducción de entrada de dinero, por ello los sacerdotes, apoyados por la comunidad, llevan a cabo actividades como venta de comida y rifas.
Lo anterior se debe a que las iglesias tienen necesidad de cubrir gastos de energía eléctrica, pago del seguro social de los empleados y sueldos, teléfono, impuesto predial, agua potable y otros.
Mencionó que los sacerdotes enfermos, discapacitados y retirados de su labor que no tienen familiares que se hagan cargo de ellos son atendidos en una casa sacerdotal en Mexicali, también sostenida con la cooperación de bienhechores.
Por su parte, la madre Elizabeth Enríquez Hernández, directora general del Instituto Cristóbal Colón de esta ciudad, dio a conocer que las integrantes de la Congregación Hijas del Sagrado Corazón y de Santa María de Guadalupe están afiliadas al IMSS.
Comentó que al igual que otros trabajadores, ellas cuentan con seguridad social y cuando llega el tiempo de pensionarse, reciben el pago mensual por los años laborados en diversas instituciones.
Por último, resaltó que en este tiempo de pandemia se han cuidado para no infectarse de Covid-19 y en el caso de las religiosas que trabajan en el Instituto Cristóbal Colón no han tenido contacto presencial con los alumnos porque las clases se imparten de manera virtual.