El uso de pestañas postizas o extensiones en éstas representa un riesgo para la salud de los ojos y párpados porque acumulan bacterias, suciedad y químicos, advierte la oftalmóloga Laura Hurtado Mendoza.
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Al respecto, comentó que el pegamento que se utiliza para su colocación contiene diversos químicos que dañan la piel, especialmente la del párpado. Y es que el mayor peligro se presenta cuando la persona usa todos los días este elemento de belleza, sobre todo si son muy largas, porque pueden causar tensión en el folículo de las pestañas naturales y eventualmente hacer que se caigan y que no vuelvan a crecer.
La oftalmóloga adscrita al Hospital General de Zona (HGZ) número 30 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Mexicali, indicó que los peores escenarios son al colocarlas con el uso de pinzas, dañando al ojo; el pegamento cae dentro del mismo o la mala colocación, lo que puede provocar un daño en córnea o una infección que, en caso de agravarse, se puede perder la vista.
También dijo que el uso de las pestañas postizas genera reacciones alérgicas a algunos de los competentes del pegamento.
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Hurtado de Mendoza recomendó que su uso sea de manera temporal, atendiendo una buena higiene al colocarlas y retirarlas.
Finalmente, llamó a que ante cualquier inflamación, enrojecimiento o molestia en la zona de los ojos, las personas acudan de inmediato con el médico a la Unidad de Medicina Familiar (UMF) para que determine el tratamiento a seguir o para que canalice al paciente con un médico oftalmólogo.