Todos los días a las 8:00 horas inicia la jornada de trabajo para Eduardo Castillo, quien hace tiempo se dedica a la venta de empanadas en la fila de vehículos que se dirigen a Estados Unidos.
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Decenas de personas laboran en la avenida Carlos G. Calles, con la finalidad de ganar dinero para los gastos de sus hogares.
“En esta época por la pandemia las ventas no están muy buenas”, comentó quien ofrece delicioso pan dulce relleno de cajeta, piña y calabaza.
En esta temporada de calor la gente no le da como el antojo de comerse un pan, es por eso y aparte la falta de clientes por la emergencia sanitaria, a Don Eduardo se la ha hecho más difícil llevar el sustento a su hogar
7 horas de trabaja en la línea internacional, para obtener la venta requerida
5 meses de intenso calor tienen que soportar los comerciantes de ese lugar
