Un ciudadano británico que contrajo la nueva cepa de coronavirus mientras asistía a una conferencia en Singapur pudo haber contagiado a al menos otras siete personas cuando se hospedó en una cabaña de un pueblo de montaña francés en su camino a casa, dijeron el domingo expertos en salud.
El hombre, el tercer caso oficial del virus en Gran Bretaña, permaneció durante cuatro días en el chalet en Les Contamines-Montjoie a fines del mes pasado, bajo el mismo techo que un grupo de turistas de Reino Unido y una familia británica que vivía en el pueblo.
Como resultado, cinco personas de ese grupo en la estación de esquí de los Alpes, incluido un niño, contrajeron el coronavirus, dijeron funcionarios franceses este fin de semana.
Pero las complicaciones no terminan ahí. La enfermedad transmitida por el mismo hombre podría haberse propagado a otros lugares, lo que pone de relieve los desafíos que enfrentan las autoridades de salud para contener las infecciones en una era donde los viajes por avión y tren son sumamente masivos.
Las autoridades españolas dijeron el domingo que un hombre británico había dado positivo en Mallorca después de entrar en contacto con una persona infectada en Francia.
Mientras tanto, funcionarios de salud británicos dijeron que el país había registrado su cuarto paciente de coronavirus, lo que vincularía el brote al caso del ciudadano británico que contagió a más personas al detenerse en el pueblo de montaña de Francia.
Un alto funcionario de salud francés, Jerome Salomon, confirmó en un comunicado transmitido por televisión que los dos casos en Reino Unido y el otro en Mallorca estaban relacionados con el grupo que se alojaba en el chalet en Les Contamines-Montjoie.
Paul Hunter, profesor de medicina en la Universidad de East Anglia en Inglaterra, dijo sobre el nuevo paciente con virus del Reino Unido: "Este caso es parte del mismo grupo que según los reportes está vinculado a un ciudadano británico que regresó de Singapur".
Sin embargo, en términos más generales, aunque el brote del nuevo coronavirus se ha extendido a al menos 27 países y territorios, según un recuento de Reuters, solo una pequeña fracción de los casos -alrededor de 330 de los más de 37.000- se han detectado fuera de China continental.
Las autoridades francesas dijeron que estaban rastreando a todas las personas que podrían haber estado en contacto cercano con el grupo de 11 británicos expuestos al virus después de compartir alojamiento en el pueblo de los Alpes.
Cinco de ellos dieron positivo a la nueva cepa originada en China, incluido un niño de nueve años y su padre. Otros dos menores, los hermanos del niño infectado, fueron hospitalizados en Francia para ser sometidos a controles, agregaron las autoridades.
Su madre había abandonado el país cuando comenzó la investigación y estaba bajo observación en un hospital del Reino Unido, dijeron funcionarios franceses. No estaba claro si era el último caso diagnosticado en suelo británico.