A la altura de la avenida Mazatlán y calle 33, fue abandonada incrustada en la parea de una casa, una camioneta Ford Explorer 2000, la que antes chocó contra el cerco del mismo domicilio.
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Dentro de la unidad no fueron encontradas evidencias de que alguien hubiera resultado herido.
Agentes de Policía y Tránsito Municipal al llegar al lugar, ante reporte de choque, hallaron la camioneta abandonada, la que había averiado como 9 metros del cerco de malla ciclónica que tenía de altura 1.80 metros, así como una de las paredes de la casa.
Los moradores de la casa, así como algunos vecinos, dijeron que no sabían hacia donde se había ido el conductor, y a pesar de que fue hecho fuerte patrullaje en las calles cercanas, no fue ubicado, sospechando los agentes que abordó otro vehículo, posiblemente un taxi.
En clínicas y hospitales locales no reportaron a persona lesionada relacionada al accidente.
Posteriormente en la investigación, los uniformados aclararon que el percance ocurrió en el momento que la camioneta color guinda, con placas de California, al transitar en dirección al sur sobre la calle 33, llegando a la avenida Mazatlán pierde el control del volante el cafre, suficiente para cargar a la derecha, derribando el cerco para posteriormente impactar la casa de la familia Duarte.
