Una sociedad justa y equilibrada solamente se alcanza al tener la inclusión de todos sus elementos, por ello es necesario trabajar en favor de la población con discapacidad.
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Lo anterior lo expresó Claudia Pavlovich Arellano, gobernador de Sonora, durante la entrega de sillas de ruedas PCI especiales a menores con parálisis cerebral albergados en el centro de asistencia social Unacari.
Acompañada por Saúl Rojo y Rosalina de Rojo, presidentes del Patronato de la Casa Hogar Unacari y Wenceslao Cota Amador, director de DIF Sonora, la mandataria estatal dijo que con las medidas sanitarias por Covid-19, se han tenido que suspender algunas actividades de la dependencia y del Patronato, sin embargo el trabajo en favor de la niñez sonorense no se detiene, ni la entrega de implementos que ayuden a mejorar su calidad de vida.
En esta ocasión se otorgaron siete sillas de ruedas PCI especiales para niños con parálisis cerebral albergados en el centro de asistencia social Unacari, como parte del plan de restitución de sus derechos y calidad de vida.
Pavlovich Arellano mencionó que este tipo de aparatos ortopédicos representa una mejora en la calidad de vida de niños con discapacidad, les permiten avanzar en su recuperación física y contribuyen a que gocen su derecho a la convivencia familiar.
“Estamos trabajando todos los días, con pequeñas y grandes cosas que mejoren la calidad de vida de nuestra gente, sobre todo de nuestras niñas y niños, es una gran herramienta de vida para seguir adelante”.
La gobernadora se trasladó al domicilio de la familia Llanes Oximea, en la colonia Quintas del Sol, donde entregó una silla de ruedas ortopédica tipo TOMATO para Valeria, de 10 años, quien padece parálisis cerebral tipo espástica; también se le otorgaron pañales, latas de alimento Pediasure y medicamentos para su atención.
