América y Guadalajara guardaron luto. Por primera vez en la historia del futbol mexicano no se cumplió una cita programada para un Clásico Nacional, tras el sismo que azotó a la zona centro del país el 19 de septiembre, la Liga MX determinó suspender todas las actividades del futbol mexicano.
El estadio Azteca cerró su cancha y se convirtió en un centro de acopio, en una fortaleza para recolectar víveres durante todo el fin de semana. La casa del América sí tendrá actividad, pero en aras de ayudar a los damnificados en Oaxaca, Chiapas, Morelos, Puebla y la Ciudad de México.
El futbol tendrá que esperar. La jornada 10 se volvió a suspender, y es que en el torneo pasado también tuvo una pausa por el paro arbitral que se suscitó el 17 de marzo del presente año.
Sin embargo, esta ocasión en el marco de un Súper Clásico, el choque más esperado del Apertura 2017, capaz de vibrar a gran parte del territorio mexicano.
Águilas y Chivas no se verán las caras en el mes patrio como estaba pactado, será a media semana y en octubre, en pleno desenlace de la actual campaña.
No lo harán cuando el cuadro emplumado tenía un vuelo ascendente que lo colocó en la segunda posición de la clasificación.
Por su parte, el Guadalajara, urgido de puntos y vigente defensor de la corona, tendrá que buscar su resurgimiento ante otro equipo y no frente al odiado rival deportivo.
La frialdad de los números señalaba a los de Coapa como favoritos: 17 unidades, con un saldo de cinco triunfos, dos derrotas y dos igualadas. Los pupilos de Matías Almeyda llegaban en el peldaño 12 de la tabla con nueve puntos y apenas un éxito en la campaña.
El cuadro azulcrema había igualado 1-1 ante Xolos en la frontera, mientras que Chivas empató por el mismo marcador frente a Pumas en su casa y buscaba tres puntos que lo pusieran en la pelea.
La buena noticia para el Rebaño Sagrado era que Alan Pulido ya estaba listo para hacer su regreso tras más de dos meses por lesión en el húmero del brazo izquierdo, así que en un mes el ariete tamaulipeco podría encontrarse en buen momento futbolístico y estar a tope frente al odiado rival rojiblanco.