La revista médica SAGE dio a conocer el caso de una mujer canadiense que sobrevivió al impacto gracias al implante de seno, que desvió la bala y le salvó la vida.
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La mujer de 30 años fue ingresada a la sala de emergencias luego de recibir un disparo en el pecho, sin embargo, al momento de proceder a quitarla, los cirujanos encontraron que la bala se encontraba incrustada en el seno izquierdo, fracturandole el lado derecho, ya que rebotó a través del esternón y lo único que hizo fue romperle la costilla.
"El implante causó el cambio en la trayectoria de la bala", explicó el cirujano Giancarlo McEvenue a CNN. Agregó que en el lado izquierdo están el corazón y los pulmones, así que si la bala hubiera penetrado por ahí, habría sido una lesión posiblemente mortal.
Por medio de una serie de radiografías, los médicos detectaron la bala en la pared torácica lateral derecha, además de una costilla fracturada y burbujas de aire en el seno izquierdo, concluyendo que este viajó desde el seno izquierdo hasta la pared torácica derecha. Por lo demás, la mujer resultó notablemente ilesa.
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El hecho se registró en 2018, sin que se conociera el nombre del tirador, pues al parecer ni la misma víctima lo conoce. Tampoco el arma de fuego se recuperó, pero la paciente fue dada de alta por el servicio de traumatología tras retirarle los implantes y recetarle un ciclo de antibióticos.
La revista también informa que existen muy pocos casos de implantes mamarios rotos debido a una lesión por arma de fuego, pero por lo menos en tres casos, se cree que este es el responsable de salvar las vidas de las víctimas.
