El Colegio de Contadores Públicos del Desierto está de manteles largos, ya que cumple 30 años de ser fundado, y lo celebraron con la entrada de una nueva mesa directiva, que es encabezada por Belén Pérez Ruelas, en sustitución de Everardo Camacho Mendoza.
La nueva mesa directiva quedó integrada, además de Pérez Ruelas, de Saida Báez Soto como vicepresidenta, Rosa Delia Bobadilla Ibarra como secretaria y Yedith Casillas Peñuelas como tesorera.
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La nueva dirigente de los Contadores dijo sentirse muy honrada por encabezar el organismo, ya que siempre haba sido uno de sus objetivos de vida, y ahora se le cumplió.
“Ese colegio, hace muchos años, antes de ser parte de él, me puse de objetivo ser su integrante, y el estar representándolo por este año, para mí es honor, porque ya ha trabajado en eso, tiene su nombre en la ciudad, tenemos muy buenos socios para esto, y es un premio para mí”.
Agregó que se trata de un reto y buscará cumplir con los objetivos que se trazó para los siguientes doce meses, en el sentido de hagan encuentros con las autoridades de los tres niveles de gobierno, traer expositores y estar actualizados con los cambios que hace la autoridad fiscal.
Dijo que los contadores deben estar capacitados constantemente, y sobre todo, invitar a los jóvenes para que sean parte de la organización.
De hecho, al Colegio se acaban de integrar cinco jóvenes, quienes se piensa que pueden aportar mucho, ya que cuentan con otra visión.
“Ellos pueden ver otras cosas que nosotros no, y pueden aportarnos mucho, por eso los estamos integrando y vamos por más”.
Comentó que si bien, el Colegio cumple 30 años de haber sido creado, no habrá un festejo como tal, ya que la toma de protesta de la directiva, es la forma en que ellos lo celebran, debido a que es su fiesta anual.
“Por eso, la toma de protesta la hacemos muy cerca del 25 de mayo (Día del Contador), hubiera sido muy bueno que coincidiera con el festejo, pero no se pudo”.
Son cumplidos los sanluisinos
Indicó que, constantemente la autoridad fiscal modifica las leyes, y cuando lo hace, es como si fuera “cerrado el círculo”.
“Me refiero a que se exige más, y cada vez más ponen cosas más específicas, aunque nos hace una carga administrativa mucho más fuerte para el contador, se va a haciendo la contabilidad más sencilla, en el sentido de que se va hacer más fácil de entender todo”.
En cuanto a la presentación de la declaración fiscal (que finalizó hace algunas semanas), mencionó que los sanluisinos sí han cumplido con sus obligaciones.
“Todo contribuyente está preocupado por presentar su declaración, nosotros como profesionales de la contabilidad, tenemos que cumplir en tiempo y forma”.
