Un severo daño económico, social y político generaría la clausura de la frontera entre México y Estados Unidos, el cual fue anunciado por el presidente de Estados Unidos Donald Trump para la actual semana.
El economista Raúl Fuentes Ovando y la socióloga Aidé Patiño Nevares, coincidieron en que se haría un caos en ambos lados del cerco, por una parte, pausar la exportación de productos con daños millonarios, así como el cruce de personas que a diario van al vecino país del norte, como es el caso de los trabajadores y estudiantes.
Al cerrarse la frontera se bloquearían las garitas turísticas y comerciales, ambos países tendrían afectación, pero lo más severo sería para México, debido a que es el país con una economía menos fuerte, consideró Raúl Fuentes.
“Desde mi punto particular de vista, dudo mucho que se dé un cierre total y permanente, sería más bien parcial, por horas, no conviene a ambos países el bloqueo”, opinó.
Indicó que ensambladoras como Ford, Toyota, maquilas como Flex y otras que se encuentran situadas en todo el límite, se verían afectadas, además los campos sanluisinos están exportando a USA hortalizas como cebollín, espárrago, brócoli, cebollín, rábano, solo por mencionar algunos, habría daño para el agro.
“Los perjuicios económicos son muchos; lo que busca el presidente estadounidense es que el Congreso le autoricen los recursos para construir el muro fronterizo y otros presupuestos”, expresó.
Por su parte Aidé Patiño consideró que el caos sería total, ya que miles de trabajadores y estudiantes cruzan a diario a Estados Unidos, además de que los comercios fronterizos se verían duramente dañados.
“Gasolinera, mercados, tiendas de ropa, zapaterías son algunos de los negocios que viven de los compradores mexicanos, le pega a todo lo social, económico y político”, finalizó.
Desde mi punto particular de vista, dudo mucho que se dé un cierre total y permanente, sería más bien parcial, por horas, no conviene a ambos países el bloqueo.
RAÚL FUENTES OVANDO, ECONOMISTA