Juan Gerardo González, de 25 años de edad, empezó a hacer malabares y otras artes circenses en las calles, por necesidad económica y aunque es un trabajo que disfruta al máximo, desearía dejarlo algún día para estudiar una carrera profesional.
El joven es originario de Culiacán, Sinaloa, pero creció en Ensenada, Baja California y actualmente reside en Mexicali. Por ahora, trabaja en los cruceros viales de San Luis Río Colorado, Sonora, pues manifiesta que en esta ciudad la gente es amable y lo apoyan con propinas, luego de admirar el acto de malabares con pelotas que presenta.
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Por el momento, Juan Gerardo está instalado en la avenida Obregón y calle Siete, en donde comparte la esquina con otro joven dedicado a hacer actos de magia. A ese lugar llega a las 11:00 de la mañana y se retira alrededor de las 6:00 de la tarde, pues debe tomar el camión de regreso a Mexicali.
El artista urbano contó que hace 10 años empezó con la práctica de malabares. “Aprendí a hacer malabares gracias a que un muchacho que conocí en la calle me enseñó y pues me gustó hacerlos. Más que nada, lo hago para obtener algo de dinero, se puede decir que por necesidad”.
Juan Gerardo consideró que el trabajo en el “semáforo” no es tarea fácil, tomando en cuenta que se arriesga la vida al estar entre los automóviles, aunado a que en época de verano debe permanecer muchas horas bajo los intensos rayos del sol, soportando temperaturas cercanas a los 50 grados centígrados.
El joven ha recorrido varios municipios de Baja California y Sonora como Mexicali, Tijuana, Ensenada, Rosarito y San Luis Río Colorado, para llevar las artes circenses pues además de los malabares también practica actos de magia utilizando una paloma.
Comentó que se ha encontrado en el camino con personas que valoran el trabajo que hace y lo ven con admiración; mientras que otras no lo respetan y hasta se burlan de la actividad que realiza y aunque eso lo hace sentir mal, trata de no hacer caso a conductas negativas.
DESEA ESTUDIAR UNA CARRERA PROFESIONAL
Juan Gerardo externó que por un tiempo trabajó en un rancho cuidando ganado y de ahí surgió su amor e interés por los animales. Por eso tiene contemplado, algún día, iniciar sus estudios de bachillerato para posteriormente inscribirse a la universidad ya que uno de sus sueños es ser veterinario.
Claro que me gustaría seguir estudiando. Nada más terminé la secundaria. Intenté entrar a la prepa abierta, pero el examen es muy caro, más de 2 mil pesos. Aun así, espero poder entrar algún día
Juan Gerardo González optó por venir todos los días a San Luis Río Colorado porque la sociedad es amable y le da aportaciones económicas por las actuaciones que lleva a cabo en uno de los cruceros viales más transitados de esta ciudad fronteriza. Para finalizar dijo: “Agradezco de corazón a todas las personas que me brindan su apoyo a donde quiera que voy”.