El Síndrome de Muerte Súbita del Lactante, también conocido como muerte de cuna, se presenta en niños y niñas menores de 1 año de edad y aunque no se conocen las causas que la provocan, hay formas de disminuir los riesgos.
El síndrome de muerte infantil súbita es la muerte sin causa aparente, que por lo general ocurre durante el sueño de un bebé aparentemente saludable, menor de un año de edad.
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No se conoce la causa, pero, al parecer, la muerte de cuna podría asociarse con anomalías en la porción del cerebro del bebé que controla la respiración y la vuelta al estado de vigilia.
De acuerdo a lo informado por el doctor Óscar Castro Guevara, director de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 38 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la Muerte Súbita Infantil puede ocurrir por diversos factores entre los que destacan que el bebé duerma boca abajo, que algún objeto como un muñeco o una cobija obstruya su respiración y el calor excesivo de la habitación o que lo cobijen de más.
Además, otras causas son: efectos cerebrales pues algunos bebés nacen con problemas que los hacen más propensos a morir a causa del síndrome de muerte infantil súbita. En muchos de estos bebés, la sección del cerebro que controla la respiración y el despertar no se ha desarrollado lo suficiente como para funcionar correctamente, así como tener problemas respiratorios.
Óscar Castro señaló que la muerte de cuna está relacionada también con el nacimiento prematuro, que la mamá consuma drogas durante el embarazo, que la mujer haya parido antes de los 20 años de edad, que el bebé permanezca en una habitación con altas temperaturas o esté muy cobijado, dormir boca abajo y que se fume cerca del menor.
El doctor Castro refirió que esta situación se presenta con mayor frecuencia en varones y en menor medida sucede en niñas.
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No existe un modo garantizado para prevenir el síndrome de muerte infantil súbita, pero los padres de familia pueden ayudar a que el bebé duerma de manera segura si mantienen su cabeza descubierta, no lo abrigan demasiado, utilizan un colchón firme que se ajuste bien a la cuna, evitan dejar juguetes y otros objetos al alcance del menor, no usan almohada dentro de la cuna y no fuman cerca del bebé.
Por último, externó que en el IMSS no es frecuente atender este tipo de casos. Sin embargo, manifestó que como médico le ha tocado enterarse de que sí han sucedido este tipo de situaciones en esta ciudad.
