La venta de cerveza es permanente, todo el año, los 365 días se expende en diversos negocios, ya sea supermercados, tiendas de autoservicio, abarrotes, restaurantes y expendios, pero, éstos últimos han tenido muchos problemas para acomodar el producto entre los clientes.
Para Alejandro Navarrete, quien es encargado de un expendio, son los supermercados quienes acaparan las ventas, ya que tienen la mercancía a un precio más accesible para el público, y eso hace que ellos los prefieran.
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“Lo que pasa es que ellos (los supermercados) tienen más promociones y están acaparando las ventas, por ejemplo, aquí tenemos el seis en 120 pesos, y ellos lo tienen 100 pesos o menos, contra eso, no se puede competir, por más que queramos”.
Agregó que, en algunos casos, hay desabasto del producto, por lo que también eso “contribuye” a dificultar más la venta del líquido ambarino.
Dijo que el fin de semana pasado estuvieron buenas las ventas, debido a los festejos del Día del padre, pero su incremento fue de 10 a 15 por ciento, en realidad, no fue tanto como se esperaba, pero al menos salió para equilibrar la balanza del negocio.
Mencionó que, por lo regular de lunes al miércoles, las ventas son bajas, pero de jueves a domingo se incrementan, aunque no lo suficiente.
Comentó que, en sí, las ventas de los expendios en general están por debajo de lo habitual, pero es así como se han comportado en estos días, aunque se espera que se mejore la situación más adelante.
Indicó que ahora que aumentó el calor, espera que el producto se expenda mejor y en mayor volumen.
“Aquí se vende cerveza todo el año, independientemente cómo esté el clima, la gente busca el producto en mayor o menor medida; a principios de semana, la venta está baja, pero conforme se acerca el fin de semana, se incrementan”.
Externó que, lo que se puede vender en sábado y domingo, se equipara a los números que se pueden expender producto durante toda la semana.
“Si hablas de cuatro días, lo vendes en solo dos; lo que haces en dos días es lo que harías en toda la semana, esto ayuda mucho; claro, siempre y cuando no pongan un retén, porque ya afecta la venta”.
En cuanto a los asaltos, dijo que se han presentado muy poco, al menos, en el establecimiento en que se encuentra (Mérida y calle 31) ya que en ocho años apenas han recibido la visita de los delincuentes unas cuatro veces.
“Lo que sí hay es vandalismo, esto, por las noches, nos han quebrado los vidrios, pero eso es lo más fuerte que hemos tenido, pero asaltos, casi no”.
