Debido al alto número de usuarios, la avenida Obregón, -al ser parte de la carretera internacional número 2-, es considerada por los residentes locales como una vialidad peligrosa.
Por ese sector de la ciudad circulan miles de unidades de todo tipo, desde automóviles particulares, tractocamiones de carga, autobuses de pasajeros y unidades motrices de todo tipo, al ser el paso casi obligado para internarse a territorio del vecino estado de Baja California.
Se ha hablado mucho de la construcción de un libramiento para aligerar dicha vialidad, sin embargo, no se ha concretado el proyecto que traería beneficios a los residentes de esta frontera.
Las gestiones requieren de la intervención de las tres órdenes de gobierno, y sobre todo el empuje de los actuales funcionarios para hacer realidad este proyecto, el cual tiene años siendo promesa de campaña en épocas electorales.