Los agentes de patrulla fronteriza realizaron dos irrupciones en casas que se encontraban cercanas a la frontera, lugar que durante las rondas de patrullaje había presentado indicios de un grupo de personas alejándose del río internándose en territorio norteamericano.
Los agentes de patrulla fronteriza del sector del Valle Rio Grande realizaban rondas cuando encontraron huellas de un pequeño grupo de migrantes al solicitar la asistencia de un sheriff del condado de Starr llegaron a la residencia donde realizaron el arresto de 13 personas.
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El grupo de migrantes que intentaban vivir el sueño americano se clasificaron como recién ingreso y al momento de ser arrestados no opusieron resistencia, eran provenientes de México y El Salvador.
De la mano del primer acontecimiento los oficiales reciben información acerca de dos residencias ubicadas en Edinburg, Texas, las cuales serán utilizadas como resguardo para el contrabando de migrantes por lo cual los agentes acudieron a las cercanías para poder realizar vigilancia.
Con el apoyo de los oficiales de Hidalgo se pudo localizar dentro de la primera casa a seis personas provenientes de México y Honduras, mismos que se encontraban ilegalmente dentro del país.
De la segunda casa partió un vehículo dirigiéndose a un mercado de la localidad, dentro del mismo iban dos sujetos que él se interceptados por la patrulla fronteriza trataron de escabullirse en la maleza pero fueron capturados resultando ser uno ciudadano estadounidense y el otro mexicano.
Al registrar el vehículo se pudo recuperar una escopeta cargada que fue entregada a la patrulla de Hidalgo, procesando el regresa de los migrantes y las evidencias encontradas.
