Hasta la fecha, en relación al asalto ocurrido el pasado 22 de agosto en un rancho de la Colonia Hidalgo, donde el vigilante fue asesinado a balazos, las autoridades no han detenido a sospechoso alguno.
La víctima identificada como Francisco “N”, de 43 años de edad, fue dominado por varios hombres armados que robaron una pipa y un tractor, los que horas después fueron localizados abandonados en el valle, tras intensa búsqueda a cargo del grupo especial de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal, Marinos y Policía Estatal de Seguridad Pública.
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La movilización policíaca hasta el rancho ocurrió muy tarde, ya que los moradores al no ser atendidos en el 911, a pesar de las múltiples llamadas que realizaron, tuvieron esperar que amaneciera para poder salir y llegar hasta una estación de bomberos para dar aviso, ocurriendo esto como a las 7 de la mañana.
Según los afectados, los sujetos que portaban armas de alto poder arribaron entre las 12 de la noche y 1 de la mañana.
Por la manera sorpresiva del ingreso, prácticamente nadie pudo evitar el ilícito, siendo todos inmovilizados de las manos, pero el velador en un momento desesperado intentó enfrentarlos, por lo que rápidamente fue sometido.
Después todos fueron conducidos al canal cercano, donde a la orilla fueron hincados.
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Ante la mirada de todos, Francisco fue baleado en la cabeza.
Todo el equipo que había en la bodega, así como la pipa y el tractor se llevaron.
Hoy, los afectados continúan clamando justicia, haciendo un llamado a las autoridades para que se intensifiquen las investigaciones tendientes a la captura de los responsables.
