Covid-19 cambia estilo de vida
El “agro” no es la excepción.
El Covid-19 es tema obligado en cada nota periodística o columna, en todas las fuentes, así que no podemos ser la excepción, ya que en nuestra área, el campo, también están resintiendo las restricciones que se están dando, ya que se tiene que cambiar el estilo de trabajo de cada quien.
Una de las situaciones que se está dando y afecta gran parte de nuestros agricultores es que la dificultad para muchos de ellos que a diario tienen que cruzar de Estados Unidos a sanluisinas tierras y luego de regreso, pasando por estrictos filtros ante la pandemia mundial y algo similar hay entre este municipio y Mexicali.
Estos agricultores se están adaptando por los problemas para el cruce y por ello tratan de quedarse la mayor parte de la semana del lado sanluisino cuando anteriormente cruzaban la línea a diario, pues no había ningún problema de acuerdo con lo que varios de ellos han comentado a este servidor, en pláticas donde manifiestan incertidumbre por esta atípica situación.
También hay agricultores del lado de Mexicali que siembran aquí o viceversa, sanluisinos que tienen que desplazarse al vecino estado atendiendo sus parcelas, ya que la millonaria inversión ya está hecha y por nada del mundo la van arriesgar así que a seguir sorteando los filtros ya sea en el Río Colorado o la Frontera de Estados Unidos.
Así que esta situación por el Covid-19 los hace cambiar sus rutinas diarias y no pocos son los que prefieren quedarse más tiempo en uno de los dos lados con los consabidos gastos que ello conlleva, así que piden a Dios que se termine pronto esta cuarentena que a lo mejor será centena porque los cuarenta días pasaron hace mucho.
En otro orden de ideas, déjenme decirles que los amigos algodoneros siguen comiéndose las uñas de nervios porque el ciclo primavera-verano avanza inexorablemente y hasta ahora el ansiado repunte del precio por quintal no llega y sigue entre los 50 y 60 dólares sin que se avizore un pronto levantón que lo dispare a más de 70 como ocupan.
Felipe Gómez Gamboa, quien sembró el también llamado "oro blanco" en el área del ejido San Luis, dice que de no efectuarse un aumento sustancial o en su defecto algún tipo de apoyo oficial que mejore la cotización, difícilmente saldrán airosos del ciclo que transcurre y donde ocupan que salga lo suficiente para no quedar con deudas al final.
Así que ocuparían de 70 o más bien 73 dólares por quintal, para que una vez descontado lo del pago al intermediario o "brocker", como se le denomina en el argot del comercio internacional que son tres billetes verdes y así les dejen 70, significando 350 por paca y de esa manera ya les quedaría suficiente para recuperar lo invertido y sostener a las familias.
Muchas gracias por la atención prestada estimados y finos amigos lectores de TRIBUNA de SAN LUIS, quedamos pendientes para el siguiente lunes, así que cuídense, permanezcan en casa para protegerse y proteger a los demás. Dios los bendiga.
