Urge la unidad de los productores del valle
Estos 2 años del nuevo gobierno han sido los más problemáticos para los productores del valle, por lo que se hace indispensable se reúnan en una organización y las pasiones partidistas no se impongan, ya que no lograrían nada.
Antes que ser partidistas, deben enfocarse a motivar y llevar a cabo una organización en la que participen los productores del valle, sin distinción, pues deben priorizar las soluciones a la problemática que se les presenta y sin duda cuando estén bien preparados como en el valle del Yaqui, serán los políticos quienes los visitarán para conocer las condiciones en que realicen sus actividades.
El Ing. Juan Armenta Magaña comentó lo anterior, indicando de seguir cada quien por su lado, a ningún político le interesa y eso está demostrado, pues ningún diputado federal se ha acercado para conocer los problemas de quienes con su esfuerzo y gran voluntad siguen laborando por lo que los mercados extranjeros solicitan y cubrir la demanda del comercio local y tienen los empleadores gran cantidad de trabajadores del campo, pues algunos contratan hasta 5 mil durante cada ciclo del valle con los diversos productos hortícolas.
Por su parte, los productores de trigo y algodón también son primordiales, pues el segundo es materia prima de gran demanda en los países en sus fábricas de ropa y cuyos cobros se hacen en dólares, al igual que el primero, por lo que representan importante derrama económica y junto a los horticultores forman parte de la importante reactivación económica de cada año.
Añoran los años anteriores, donde había diputados que venían a San Luis Río Colorado para conocer los problemas de los agricultores como de las empresas del valle y realizaban gestiones, asegurando los apoyos que tanto necesitan en la comercialización de sus artículos como en los costos y compensar los bajos precios de trigo y algodón, que en ocasiones no concuerdan con los gastos de producción.
Por lo anterior, es indispensable que se unan los productores del valle, pues aquí no hay campesinos, quienes en otras entidades del país tienen máximo 5, 3 o 2 hectáreas y solamente laboran lo que necesitan para subsistir.
Aquí se trabaja para exportar cosechas y consumo nacional y local, como lo hace la Cooperativa Bonfil, que desarrolla en su molino la mejor harina de calidad, con trigos del valle y por falta de apoyos oficiales tiene serios problemas financieros, pues no se presenta gobierno federal como hace años.
Por lo tanto, mientras no haya unidad de los productores, los problemas seguirán siendo los causantes que cientos de hectáreas se queden sin sembrar y vaya disminuyendo el aspecto productivo y laboral por el abandono de los funcionarios responsables de atenderlos.
