La vaquita marina es una especie actualmente en peligro de extinción, solamente se reproduce en aguas del Alto Golfo de California y actualmente quedan pocos ejemplares.
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El investigador del Instituto Nacional de Ecología, Armando Jaramillo Legorreta, informó que la población de vaquitas marinas se encuentra muy cerca de desaparecer.
“La población de vaquita ha caído drásticamente en los últimos 15 años, hemos llevado un conteo de los ejemplares y desde 1995 la población ha decaído de manera alarmante, por lo que ahora se estima que quedan alrededor de 22 ejemplares solamente”.
Dijo que han sido muchos los esfuerzos por tratar de conservarla, pero ha sido muy complicado hacer un plan integral para cuidarla.
Actualmente, el gobierno federal ha dicho que sí cuenta con una estrategia para la conservación de la especie, pero nadie la conoce como tal, así que eso complica saber si va a ser eficaz o no.
NÚMEROS
En 1996 se decretó la veda para proteger a la vaquita marina y se recomendó reducir la tasa de mortalidad de pesca a cero debido a que se daba la baja de ejemplares del cetáceo, ya que la población era de 567, decreciendo en 78.
En 1997 se aprobó un plan de avistamiento de ejemplares y se hizo entre Estados Unidos y México, el cual costó 700 mil dólares y cada avistamiento valió 4 mil 400 dólares, considerado muy elevado.
Entre 1997 y 2007 hubo un descenso en la población de vaquitas, de un promedio de 52% en 10 años, que corresponde a 7% anual, se calcularon 274 individuos y en los siguientes años la tendencia sería la misma.
Para el 2015 se estimó que solo quedaban 79 ejemplares, esto representa 76% desde el 2008, por lo que la urgencia era extrema.
Para el 2019 la población de vaquita era solamente de 22 ejemplares, con un porcentaje de decremento de 98% desde 1997.
Cabe señalar que no se ha vuelto a hacer otro monitoreo, debido a la contingencia sanitaria provocada por el Covid-19.
En el 2016 se implementó un plan de conservación de vaquita marina en cautiverio, sin embargo luego de dos intentos se desistió del mismo, luego que dos ejemplares de la especie fallecieron y se concluyó que la vaquita no puede estar en cautiverio, por cuestiones de estrés.
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LA TOTOABA
Uno de los problemas de la vaquita marina es la pesca furtiva de totoaba, capturada solamente por tener el buche, pero la especie queda atrapada en las redes y ahí muere.
Jaramillo dijo que una alternativa sería la totoaba tratada en cautiverio y de esa manera no se pondría en peligro al cetáceo y ya hay esfuerzos por trabajar en ese proyecto.
ASPECTOS POSITIVOS Y NEGATIVOS
Si bien se reconoce el fracaso en términos generales en la protección de la vaquita, el investigador aseguró que se han conseguido algunos puntos positivos como el estudio al que han sometido al cetáceo, más que a ningún otro.
“Tenemos un monitoreo constante desde 2011, por eso decimos que el gobierno nunca ha sufrido de información acerca de la especie”.
Indicó que un punto negativo es que no se han podido encontrar artes de pesca amigables con la vaquita, es decir que no pongan en peligro su existencia.
Actualmente, se ignora la clase de plan integral que tiene el gobierno federal para proteger a la vaquita marina, aunque haya dicho que sí lo tiene y pronto lo dará a conocer
