El Super Bowl es un evento deportivo que reúne a las familias y amigos en convivio, y además los restaurantes esperan este día porque saben que sus ventas pueden ser muy atractivas para los comensales.
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Sin embargo, la pandemia ocasionada por el Covid-19 ha cambiado la forma en que tienen que conducirse los establecimientos, respetando los protocolos sanitarios para que no haya contagios, por lo que se ven obligados a cambiar sus estrategias comerciales.
Una de ellas es el servicio a domicilio, como una forma de combatir el posible ausentismo de los comensales en los establecimientos, que en años pasados llenaban éstos para ver el partido en las pantallas.
Para el representante de los restauranteros en la ciudad Francisco Chávez, normalmente son eventos que no dejan buenas ganancias, debido a que solamente dura cuatro horas, y el comensal está en un restaurant máximo hora y media, según el protocolo sanitario.
“A pesar de eso, ya estamos listos, vamos a trabajar como cualquier domingo, pero no quiero ser yo quien incumpla las medidas de higiene”.
Dijo que, en su experiencia, el Super Bowl no reúne tanta gente como se piensa en restaurantes, sino más bien en casas; es más, la afluencia de clientes baja el día del encuentro deportivo, hasta en un 40 por ciento, esto en relación a domingos normales.
Expresó que, salvo esta ocasión, les irá bien, porque se va a manejar el servicio a domicilio, incluso, ya hay personas que lo han solicitado, pero también han hablado para reservar espacio, pero no las manejarán.
CUMPLIR CON LOS PROTOCOLOS Y LA CLIENTELA
Por su parte, el empresario Marco Othón, mencionó que las condiciones provocadas por la pandemia obligaron a los negocios a adaptarse a las reglas de la “nueva normalidad”, y se empezó con la modalidad de la entrega a domicilio.
“Nosotros no contábamos con esto, a partir hicimos la estrategia y ahora en los eventos de este tipo podemos usarlos”.
Indicó que una de las ventajas que tienen es que el local es al aire libre, por lo que las condiciones para tener gente son un poco diferentes a los de los demás lugares, eso da más seguridad ante la pandemia”.
Añadió que los protocolos fueron un poco más fáciles de llevar a cabo, sobre todo la sana distancia entre las mesas, ya que se permitió que hubiera una separación de casi dos metros entre cada una.
Manifestó que todos los protocolos fueron implementados de manera que pudieran proteger a los comensales y a los empleados por igual.
“Hay personas que todavía están en cuarentena y utilizan el servicio a domicilio, ya tenemos pedidos para el domingo y se los llevamos a sus casas, para que no tengan que ir a los establecimientos, y se hacen con todos los cuidados que se requieren”.
Comentó que, a pesar de todo, se ha avanzado como restauranteros, a buscar nuevas estrategias y a “disputarse” la presencia de los comensales.
Irónicamente, el Super Bowl no atrae tanta gente a los restaurantes, pero debido a la pandemia, se cree que las ganancias de los establecimientos sean muy buenas, por la modalidad del servicio a domicilio.
