/ lunes 13 de julio de 2020

CONTRASENTIDO

Visita de estado




Cuando el actual presidente de México asumió su mandato delineó que su política exterior se basaría en la doctrina Estrada, que reconoce la autodeterminación de los pueblos y por ende la no injerencia en asuntos internos de otros países.

Con lo anterior, lanzó una fuerte crítica a los gobiernos anteriores que no tenían bien definidos los principios para actuar en la materia y solo se guiaban por el análisis de la geopolítica del momento para tomar decisiones.

Lo anterior causó una gran oleada de críticas exasperadas al presidente de la oposición, quienes argüían se perdería el liderazgo en el mundo que nuestro país había construido, incluso decían que el motivo real para la venta del avión era la rijosidad de él y no lo oprobioso de operar la aeronave.

Lo curioso del tema es que ese sector ahora vuelca toda su amargura hacia la figura presidencial, asegurando el fracaso de una visita de estado por el momento político que viven los vecinos del Norte.

A casi 2 años de gobierno de Andrés Manuel no se habían realizado visitas al extranjero. Sin embargo, nuestro país ha seguido recuperando su hegemonía y liderazgo en la región al actuar como todo hermano mayor: Con carácter y siendo solidario. Tal fue el caso de Bolivia, donde se actuó para salvar la integridad física del presidente boliviano y no siendo comparsa de un golpe de estado, es decir se respetó la doctrina Estrada sin perder la autoridad moral en Latinoamérica y así podemos poner otros ejemplos en donde la presencia de nuestro país en organismos internacionales se ha fortalecido.

Otro factor clave para que nuestro presidente no hubiera salido es la gestión efectiva de su operador político predilecto Marcelo Ebrard, quien ha mostrado las tablas por su excelente manejo de la cancillería y por su operación política (incluso de manera interna opacando a la encargada del despacho) que no han requerido su presencia en el extranjero. Entonces, ése es un flanco cubierto y opera como relojito suizo, lo cual le permite poder delegar a nuestro presidente.

La situación que viven los vecinos del Norte es complicada por estar en medio de un proceso electoral y con los estragos de una cruel pandemia (igual que nosotros), lo cual dificulta la reelección del actual presidente Trump.

Sin embargo, no hay que perder de vista las diferencias del sistema político electoral estadounidense que permite hacer muchas cosas que en nuestro país están prohibidas, entre ellas los funcionarios que pretenden reelegirse siguen en sus puestos y siguen haciendo su campaña, financiamientos privados por empresas, etc…, lo anterior viene al caso porque es otro argumento mal usado el considerar que el presidente de México fue utilizado para apuntalar la campaña de Donald Trump. Lo cierto es que Andrés Manuel fue un tsunami electoral que arrasó, pero eso fue en México y parece ser que es tanto el miedo de la oposición que piensan que sus poderes son universales, cuando solo son el efecto de haber anticipado y advertido a la población mexicana las erróneas políticas de administraciones del pasado.

La visita de estado se requería por ser importante el T-MEC para la región. Los discursos fueron centrados y respetuosos, delimitando muchos aspectos que están por verse. No se fue comparsa de nada ni de nadie, solo se fue a seguir construyendo una relación que seguirá siendo complicada por compartir muchos elementos y que también tiene muchos desencuentros históricos.

@GildardoLinarez

glinarez@hotmail.com

Visita de estado




Cuando el actual presidente de México asumió su mandato delineó que su política exterior se basaría en la doctrina Estrada, que reconoce la autodeterminación de los pueblos y por ende la no injerencia en asuntos internos de otros países.

Con lo anterior, lanzó una fuerte crítica a los gobiernos anteriores que no tenían bien definidos los principios para actuar en la materia y solo se guiaban por el análisis de la geopolítica del momento para tomar decisiones.

Lo anterior causó una gran oleada de críticas exasperadas al presidente de la oposición, quienes argüían se perdería el liderazgo en el mundo que nuestro país había construido, incluso decían que el motivo real para la venta del avión era la rijosidad de él y no lo oprobioso de operar la aeronave.

Lo curioso del tema es que ese sector ahora vuelca toda su amargura hacia la figura presidencial, asegurando el fracaso de una visita de estado por el momento político que viven los vecinos del Norte.

A casi 2 años de gobierno de Andrés Manuel no se habían realizado visitas al extranjero. Sin embargo, nuestro país ha seguido recuperando su hegemonía y liderazgo en la región al actuar como todo hermano mayor: Con carácter y siendo solidario. Tal fue el caso de Bolivia, donde se actuó para salvar la integridad física del presidente boliviano y no siendo comparsa de un golpe de estado, es decir se respetó la doctrina Estrada sin perder la autoridad moral en Latinoamérica y así podemos poner otros ejemplos en donde la presencia de nuestro país en organismos internacionales se ha fortalecido.

Otro factor clave para que nuestro presidente no hubiera salido es la gestión efectiva de su operador político predilecto Marcelo Ebrard, quien ha mostrado las tablas por su excelente manejo de la cancillería y por su operación política (incluso de manera interna opacando a la encargada del despacho) que no han requerido su presencia en el extranjero. Entonces, ése es un flanco cubierto y opera como relojito suizo, lo cual le permite poder delegar a nuestro presidente.

La situación que viven los vecinos del Norte es complicada por estar en medio de un proceso electoral y con los estragos de una cruel pandemia (igual que nosotros), lo cual dificulta la reelección del actual presidente Trump.

Sin embargo, no hay que perder de vista las diferencias del sistema político electoral estadounidense que permite hacer muchas cosas que en nuestro país están prohibidas, entre ellas los funcionarios que pretenden reelegirse siguen en sus puestos y siguen haciendo su campaña, financiamientos privados por empresas, etc…, lo anterior viene al caso porque es otro argumento mal usado el considerar que el presidente de México fue utilizado para apuntalar la campaña de Donald Trump. Lo cierto es que Andrés Manuel fue un tsunami electoral que arrasó, pero eso fue en México y parece ser que es tanto el miedo de la oposición que piensan que sus poderes son universales, cuando solo son el efecto de haber anticipado y advertido a la población mexicana las erróneas políticas de administraciones del pasado.

La visita de estado se requería por ser importante el T-MEC para la región. Los discursos fueron centrados y respetuosos, delimitando muchos aspectos que están por verse. No se fue comparsa de nada ni de nadie, solo se fue a seguir construyendo una relación que seguirá siendo complicada por compartir muchos elementos y que también tiene muchos desencuentros históricos.

@GildardoLinarez

glinarez@hotmail.com