Algunos dirán que se ha desatado el diablo en San Luis, que ni la cuarentena detiene los presuntos ajustes de cuenta a lo largo de estos días de pandemia en la ciudad. Que la estrategia de seguridad no funciona, que si el comandante no hace nada, que si el presidente, en fin, en tan solo unos meses aparecerán varios personajes de diferentes partidos para darles la fórmula del éxito contra la inseguridad.

En unos meses representantes de los diferentes partidos políticos de la localidad tocarán la puerta de su hogar y todos, absolutamente todos, tendrán esa solución tan anhelada por la población en materia de seguridad, les plantearán una estrategia de seguridad que jurarán y perjurarán que funcionará, pero ¿que creen? Ninguna lo hará, por la sencilla razón que prometer no empobrece, que importa si solo sean castillos en el aire.

Se podrá pensar que esto es pesimismo puro, no lo sé, tal vez sí, tal vez no, pero hay que repasar un poco la situación.

No es un secreto que la delincuencia permeó hasta los niveles más altos del poder público en México. Altos funcionarios se han visto involucrados presuntamente ya no sólo en desvíos de recursos públicos, sino inmiscuidos en tráfico de drogas y otros delitos más graves.

Y sí, México es un país donde las personas conocen nombre y apellido de delincuentes de “cuello blanco”, pero por alguna razón siguen libres, en algunos casos hasta llegan a ser candidatos electos para convertirse en funcionarios e irónicamente la gente que conoce su turbio pasado vota por ellos.

En México siempre hay alguien que conoce a equis personaje que ostenta un cargo en la Policía, Ejército, estatal o fiscalía y tiene alguna mancha o es corrupto, pero raramente continúa ejerciendo su cargo y tratando de “impartir” justicia.

El tema de la inseguridad será la propuesta más fuerte que traerán los futuros candidatos, en ella apostarán todo, pero sanluisino, piensa lo siguiente:

¿Conocido y emblemático lugar de la localidad continúa vendiendo alcohol después del horario establecido (aguaje)? ¿Continúan los “antros” de la ciudad permitiendo que fumen dentro del establecimiento, aunque no cuenten con espacio para fumadores?

Si durante años ningún alcalde ha podido obligar a que en las gasolineras no te vendan litros incompletos (aunque digan que no le compete, por Dios, fueron elegidos para ver por los intereses del pueblo, si no pueden si quiera mediar o hacer algo para que deje de pasar, entonces para qué están en el cargo, no tiene sentido).

Si durante años han conocido los lugares donde se vende alcohol de manera ilegal, van y vienen partidos políticos y nunca hacen nada para acabar con ese delito, ¿ustedes creen que podrán hacer algo para controlar un negocio tan poderoso como el tráfico de drogas, el narcotráfico?

Mientras sigan existiendo ventas de películas y música pirata y venta ilegal de alcohol, entre otros delitos a plena luz del día. Créales poco o nada cuando le digan que mejorarán la seguridad en San Luis, no pueden con esos delitos, menos con la narcoviolencia.