Inicio de campañas políticas y promesas de arreglar el mundo
A partir de esta semana se dio inicio oficial de hacer propaganda y proselitismo político a ver quién logra ganar el poder en los diferentes cargos, incluido los de regalo (Plurinominales). Ahora hay más partidos que otras veces y, la mayoría son autónomos propiedad de ciertos grupos que los formaron, muy distinto a los anteriores que formo el PRI para la labor sucia, consistente en hablar mal de otros partidos y de los candidatos, ahora se hacen socios entre unos y otros para tratar de lograr el objetivo y repartirse el premio. Ya es abierto el fin de cada uno, llegar al poder por considerarlo el mejor negocio por hacer. Los jugosos sueldos y prestaciones que se cubren con el dinero del pueblo, es algo que merece hacer hasta lo imposible por lograr meterse a gobernar, al cabo el pueblo; todo aguanta.
Ante tanto lio y carencias a nivel nacional, por la falta de una postura formal de los partidos, que al entrar al gobierno se dedican a ver como continúan cobrando en otros cargos, no en mejorar las condiciones del país y por naturaleza de los mexicanos.
Basta con observar lo que acontece con la manifestación y reclamo de las mujeres, ante los múltiples delitos y vejaciones que les cometen, sin que se demuestre interés del gobierno en atender el asunto. La desaparición, asesinatos, violaciones, menosprecio en considerarlas con el mismo derecho a percibir sueldos igual que el hombre por su trabajo etcétera, es latente y presente todos los días en todo el país. Ahora bien, el reclamo de la mujer por perjuicios que les causan no está a discusión ni en duda, lo que considero importante es discutir los tipos de reclamos y manera de hacerlo. A nadie le va bien ante la opinión pública cuando se causan destrozos a los edificios públicos, se bloquea el tráfico, se quiebran ventanas etc. Etc., esos actos desmerecen el objetivo de hacerse notar y señalar sus reclamos. Yo opino que, como presión al gobernante en turno seria bloquearle su entrada o salida a las oficinas de gobierno donde trabajan, poner mensajes de protesta y demostrar que primeramente pidieron algo y no fueron atendidas, en fin algo similar, sin duda traería la simpatía del resto de la población que no tenía idea de lo que pasa pero, el vandalismo a los edificios y bienes públicos, aparte de que no le importan al gobernante ya que no son de su propiedad, se tiene que agarrar dinero público para reponer los daños causados. Por otra parte, creo que el pedir leyes y tratos especiales para niños, jóvenes, mujeres, indígenas, adultos mayores, pobres, sindicalizados etcétera trae como resultado una profunda división entre los mismos mexicanos lo cual, facilita al gobierno seguir actuando sin importarle la sociedad ya que todos estamos divididos y, esos es causa de que la mayoría se queda apartada de lo que le pasa a los demás, por un desinterés y falta de unidad social.
Yo sería de la idea de promover que las leyes comunes se les reforme y agregue reglas donde los castigos o penas por delitos cometidos contra los más débiles físicamente, fueran más elevadas, como ejemplo seria el hombre que golpee a una mujer tendría una sanción mayor que si se agarra con otro hombre, así como también, el que le pegue a un niño, sea hombre o mujer, se le sancione con una pena mayor, de esa forma pensar en hacer leyes, de otra manera, se seguirá fomentando la división entre nosotros mismos y, seguirá siendo más difícil unirnos a las causas para manifestar inconformidades, por muy justas que sean. Esto seguirá siendo parte del actuar del gobernante, dejar que se hagan ruido al cabo no pasa nada y, como decía nuestro amigo que en paz descanse Jorge Villaseñor, junta más gente un choque de bicicletas que un candidato.
