Los derechos de las mujeres no son monedas de cambio para dividendos políticos, por lo que es necesario realizar un ejercicio legislativo ordenado y maduro y lograr aprobar en las siguientes semanas una reforma al Código Penal que proteja a las sonorenses.
Este viernes los diputados tuvimos la oportunidad de velar por los derechos de las mujeres, sin embargo la “Ley Olimpia” se tuvo que turnar a una segunda lectura porque las condiciones para aprobarse en el pleno no eran las más adecuadas, por eso solicité al presidente del Legislativo que se turnara a una segunda ronda de presentación en el pleno, por así decirlo.
Durante mi participación al finalizar la lectura del dictamen, solicité a mis compañeros de la Legislatura para que “agarran su autonomía” y decida lo que es lo mejor, si legislar unilateralmente un delito o legislar por el bien de todas las sonorenses y proteger en todo sentido lo que vulnera las mujeres, su integridad, estabilidad emocional.
Asimismo, solicité a los y las diputadas resolver el tema que es de texto y tal vez de interpretación, sobre todo cuando solo buscamos una ley que proteja a las mujeres, por eso es necesario abrir el espacio con los proponentes y las comisiones y resolver el único punto que es discutible.
Ante eso, espero que en una segunda lectura pueda llegar a un acuerdo cuando se trate del voto en lo particular y decir que este Congreso del estado legisla a favor de las sonorenses.