/ domingo 2 de junio de 2024

PROMETEO: EL TITÁN DEL FUEGO

Un personaje de la mitología griega fue Prometeo, un Titán rebelde que se enfrentó a Zeus y robó el fuego y el Don de las artes a los dioses para ayudar a los hombres a quienes consideraba vulnerables ante las grandes bestias y animales del campo. El Dios Zeus para vengarse del Titán Prometeo y de los hombres mandó construir una mujer de arcilla llamada Pandora provista con todo tipo de atributos; gracia, belleza, engaño y seducción. Pandora se casa con el hermano de Prometeo y Zeus le ofrece a Pandora una caja dorada que encerraba todos los males; entre ellos las plagas, el dolor, la pobreza, el crimen, la maldad etc… Pandora abrió la caja y salieron todos los males y cuando reaccionó cerró nuevamente la caja quedando en su interior sólo el espíritu de la Esperanza y de ahí la frase que la esperanza es lo último que se pierde, así castigo Zeus a la humanidad, pero ¿qué fue de Prometeo?, su castigo fue muy cruel y contundente se ordenó que lo ataran en una piedra y mandó una águila gigante que le rompiera el abdomen y se comiera su hígado y como Prometeo era un Titán inmortal su hígado se regeneraba todas las noches, para sufrir al siguiente día el mismo tormento.

Historia cruel de Prometeo en la mitología Griega, pero algo parecido con la realidad que vivimos en nuestro Amado y maltratado México, un país donde la caja de pandora se abrió y los males rebasan toda expectativa; dolor, miedo, cansancio, frustración, pandemia, terremoto, huracanes, narcotráfico, secuestro, homicidio, suicidio, desaparecidos, corrupción, mentira, engaño, envidias y castigo a los que hacen el bien. Nuestro Amado País México como un Titán o gran Tlatoani vive la misma suerte del personaje Prometeo y acostado con el vientre abierto las aves de rapiña comen sus entrañas causando un gran sufrimiento, desconcierto y duelo. Pero queda en lo profundo la simiente de la esperanza.

En el lamento de los hechos volvamos a la esperanza, volvamos a la fe en Jesucristo que nos llama a la conversión, a mirarnos como hermanos y reconocer a Dios como un Padre todopoderoso que nos ama. Volvamos al adoctrinamiento de los valores y virtudes que nos hacen vivir en armonía y paz en el alma, volvamos al temor de Dios que nos hace cumplir su palabra y vivir en sus mandatos divinos. El cuerpo de Cristo es el cuerpo de alguien que entregó la vida por nosotros, es cuerpo entregado hasta el extremo y entregado por amor, por amor hasta la última gota de sangre, así como pandora destapa los males y calamidades, Nuestro Señor Jesucristo busco sanar a los enfermos, perdonar a los pecadores, curar a los heridos, restablecer el ánimo y la paz a los que tenían miedo, alimentar al pobre y proteger al desvalido. Pero sobre todo indicarnos que Él es camino, verdad y vida, la esperanza que mantiene, que sostiene con el Espíritu Consolador.

Levantarnos de las cenizas y emprender el vuelo hacia la libertad, la esperanza, la justicia y el amor.

Un personaje de la mitología griega fue Prometeo, un Titán rebelde que se enfrentó a Zeus y robó el fuego y el Don de las artes a los dioses para ayudar a los hombres a quienes consideraba vulnerables ante las grandes bestias y animales del campo. El Dios Zeus para vengarse del Titán Prometeo y de los hombres mandó construir una mujer de arcilla llamada Pandora provista con todo tipo de atributos; gracia, belleza, engaño y seducción. Pandora se casa con el hermano de Prometeo y Zeus le ofrece a Pandora una caja dorada que encerraba todos los males; entre ellos las plagas, el dolor, la pobreza, el crimen, la maldad etc… Pandora abrió la caja y salieron todos los males y cuando reaccionó cerró nuevamente la caja quedando en su interior sólo el espíritu de la Esperanza y de ahí la frase que la esperanza es lo último que se pierde, así castigo Zeus a la humanidad, pero ¿qué fue de Prometeo?, su castigo fue muy cruel y contundente se ordenó que lo ataran en una piedra y mandó una águila gigante que le rompiera el abdomen y se comiera su hígado y como Prometeo era un Titán inmortal su hígado se regeneraba todas las noches, para sufrir al siguiente día el mismo tormento.

Historia cruel de Prometeo en la mitología Griega, pero algo parecido con la realidad que vivimos en nuestro Amado y maltratado México, un país donde la caja de pandora se abrió y los males rebasan toda expectativa; dolor, miedo, cansancio, frustración, pandemia, terremoto, huracanes, narcotráfico, secuestro, homicidio, suicidio, desaparecidos, corrupción, mentira, engaño, envidias y castigo a los que hacen el bien. Nuestro Amado País México como un Titán o gran Tlatoani vive la misma suerte del personaje Prometeo y acostado con el vientre abierto las aves de rapiña comen sus entrañas causando un gran sufrimiento, desconcierto y duelo. Pero queda en lo profundo la simiente de la esperanza.

En el lamento de los hechos volvamos a la esperanza, volvamos a la fe en Jesucristo que nos llama a la conversión, a mirarnos como hermanos y reconocer a Dios como un Padre todopoderoso que nos ama. Volvamos al adoctrinamiento de los valores y virtudes que nos hacen vivir en armonía y paz en el alma, volvamos al temor de Dios que nos hace cumplir su palabra y vivir en sus mandatos divinos. El cuerpo de Cristo es el cuerpo de alguien que entregó la vida por nosotros, es cuerpo entregado hasta el extremo y entregado por amor, por amor hasta la última gota de sangre, así como pandora destapa los males y calamidades, Nuestro Señor Jesucristo busco sanar a los enfermos, perdonar a los pecadores, curar a los heridos, restablecer el ánimo y la paz a los que tenían miedo, alimentar al pobre y proteger al desvalido. Pero sobre todo indicarnos que Él es camino, verdad y vida, la esperanza que mantiene, que sostiene con el Espíritu Consolador.

Levantarnos de las cenizas y emprender el vuelo hacia la libertad, la esperanza, la justicia y el amor.